Cada punto del Celta costó 2,3 millones de euros. El peor ratio desde su regreso a Primera División y muy por encima de los 1,75 de la pasada temporada, que ya fue mala. Los números son sencillos. El club vigués presentó al inicio del curso 2019/20 un presupuesto aproximado de 85 millones de euros. A falta de la liquidación y los cambios por el coronavirus que pueden variar en algo esta cantidad, todo el gasto sirvió para acumular un total de 37 puntos. Cada uno de ellos costó 2,3 millones.
En contraposición, en el curso 2012/13, con el regreso a Primera División y un presupuesto de 34,8, el equipo olívico también se salvó en la última jornada y con los mismos puntos que en el presente curso. Eso sí, la división arroja que en aquella campaña, también con cambio de entrenador de Paco Herrera por Abel Resino, cada punto tuvo un coste de 0,94 millones.
Si la evolución en puntos en Primera División conforma una curva en forma de montaña con el ascenso de los primeros años y la bajada en el rendimiento desde los 60 puntos obtenidos en la temporada 2015/16. No obstante, el presupuesto de la entidad, en gran medido debido a la venta centralizada de derechos de televisión, continuó en una línea ascendente desde 2015. Debido a ello, cada campaña tuvo un coste mayor cada punto sumado por el club presidido por Carlos Mouriño.
Como atenuante, es preciso indicar que el contexto de la competencia también subió y, al igul que el Celta, muchos de los clubs de Primera División vieron aumentados los ingresos de manera notable en los últimos años y, por lo tanto, el flujo de dinero aumenta los salarios de los diferentes futbolistas. Aun así, los datos del equipo céltico son malos.
A la cifra de la presente campaña de 2,3 millones por punto, es preciso añadir que llega tras alcanzar una cifra también alta en el pasado ejercicio en el que el Celta firmó 41 puntos para también terminar en la décimo séptima plaza. En este caso, el coste por cada punto se incrementó hasta los 1,75 millones de euros. El gasto de la entidad se elevó a 72 millones de euros.
Hace tres cursos, con Juan Carlos Unzué en el banquillo, la entidad viguesa terminó en la décimo tercera posición con un total de 49 puntos. En este caso, el coste por punto quedó en los 1,22 millones, por los 1,29 del curso anterior ya con Eduardo Berizzo en el banquillo y en el que el Celta se quedó en 45 puntos. Eso sí, aquella campaña 2016/17 alcanzó las semifinales de la Copa del Rey y de la Liga Europa. Y, por consiguiente, en las últimas jornadas, los partidos de Primera División se vieron relegados a un segundo plano.
Curiosamente, el mejor ratio entre puntos obtenidos y millones gastados para afrontar la campaña se dieron durante los cuatro años en los que el Celta regresó a la máxima categoría de España. En las tres primeras campañas, con un cifra de gastos algo por encima de los 30 millones de euros, cada punto costo 0,94, 0,61 y 0,59 millones de euros. La peor relación está en el regreso a Primera en el que el Celta se salvó con 37 puntos, los mismos que en este curso y en el famoso final del 4% de opciones de permanencia. Eso sí, aquel presupuesto se fijo en los 34,8 millones y estaba algo inflado por las deudas contraídas con los jugadores para pagar las primas del ascenso.
La mejor relación entre presupuesto de gastos y puntos la tiene Eduardo Berizzo en su primer curso como técnico de la entidad olívica. En aquella temporada el conjunto vigués firmó 51 puntos para terminar en la octava posición. El coste por punto se cifró en 0,59 millones. La temporada siguiente, ya con un notable incremento en el presupuesto –en gran medida por el rendimiento del equipo–, el ratio se elevó a 0,7. Eso sí, el equipo obtuvo 60 puntos y se metió en Europa.
Esa temporada marca la cumbre, el punto álgido del tránsito del Celta por Primera División desde su regreso a la máxima categoría. A partir de ahí, inició una cuesta abajo que se volvió sin freno en las dos últimas temporadas. Pasó de ser un equipo competitivo que peleaba por repetir clasificación para los torneos continentales, a hacerlo por no descender.
El curso 2017/18 con Juan Cuardos Unzué terminó la temporada en la décimo tercera posición con 49 puntos. Un registro que parecía malo, pero que, dos años después, puede considerarse todo un mérito por lo que se vivió a continuación.
