La cuestión arbitral rodea la visita del Celta este domingo al Santiago Bernabéu. En gran medida, por el lado del Real Madrid tras la polémica del final del encuentro en Valencia con la sanción a Jude Bellingham y por la denuncia del Sevilla ante la Federación por las informaciones sobre los árbitros en la televisión del club blanco. Pero tampoco el Celta queda demasiado satisfecho tras la designación arbitral oficializada ayer, que pone a Mario Melero López de corto sobre el campo y a Eduardo Prieto Iglesias a los mandos del vídeo arbitraje. Este último factor es el preocupante, pues el colegiado navarro ha provocado decisiones desde el VAR contrarias a los intereses celestes hasta en tres encuentros de esta misma temporada, provocando la protesta del club ante el Comité Técnico de Árbitros.
En concreto, Prieto Iglesias sobrevolaba el arbitraje en los duelos ante Mallorca -con el tanto anulado a Jonathan Bamba al considerar que el balón no había traspasado completamente la línea-, Las Palmas -con el gol anulado a Jorgen Strand Larsen por una falta previa de Anastasios Douvikas que el árbitro de campo no había señalado- y Sevilla -con el penalti revocado por un agarrón de Jesús Navas al propio Douvikas en los últimos momentos del choque-. Desde entonces, no se había vuelto a cruzar en el camino celeste hasta la designación de ayer.
Mientras, la presión sobre Melero López, que ya era grande, aumentó ayer. El Comité de Disciplina de la Federación Española decidió ayer abrir expediente al Real Madrid a raíz de la denuncia que presentó el Sevilla por un vídeo de la televisión del club madridista sobre los árbitros previo al duelo liguero que enfrentó a ambos equipos. El Sevilla considera que estos vídeos "pretenden influir en los árbitros concretos que actúan en los partidos" y que “esto tiene especial repercusión en los partidos que se juegan en el Santiago Bermabéu”.
