Después de sólo seis entrenamientos a las órdenes de Eduardo Coudet, Jorgen Strand Larsen disfrutó de su primera titularidad anoche en el Metropolitano y el delantero noruego firmó un buen encuentro, aunque le faltó el premio del gol.
De hecho, Larsen dispuso de la primera ocasión que tuvo el Celta, antes de cumplirse el minuto 2. El escandinavo robó un balón a Hermoso y se plantó solo ante Grbic, pero el portero salió vencedor del mano a mano.
No sería la única oportunidad de un delantero que lo hizo casi todo bien, salvo marcar. Se peleó con los duros centrales rojiblancos, los fijó para dar libertad a Aspas y combinó con acierto con sus compañeros. En el tramo final, dispuso de otras ocasión a pase de Cervi, pero cruzó en exceso el remate.