En los círculos del independentismo de Puigdemonrt cirrcula una expresión que define precisamente con una frase en catalán, sobre el modo en que el fugado tiene agarrado a Pedro Sánchez ya saben por dónde. Puigdemont ratifica que su regreso a España está decidido: “Si me detienen, será una detención con poco recorrido”. Pero la famosa frase es "Tenir collat a algú" es tenerlo en sus manos o agarrado de tal forma que hace lo que quiere con esa persona. Dijo Puigdemont :... "els tenim collats i faran el que nosaltres els hi diguem i voldrem". Es decir, "los tenemos cogidos y harán lo que nosotros les digamos y queremos". A lo largo de la campaña electoral, Puigdemont, que hasta en el colmo de la impunidad a estado en territorio español a bordo de un avión en escala, no se ha privado de demostrar su seguridad en que manda sobre el que dijera que lo traería ante el juez, mofarse de él y el Estado mismo.
Y en ese sentido, su desafío al Estado y a sus instituciones está dejando, durante la campaña electoral una serie de expresiones que resumen su propia seguridad y la confianza de que, del mismo modo que se impuso la amnistía, vendrá el referéndum. Puigdemont advierte que se presentará en España antes de la amnistía, tras el resultado de las elecciones, y que si lo detienen será por corto tiempo. Está tan seguro que, tras recordarle a Sánchez que está en sus manos, desafía al Estado con toda prepotencia. De ahí que advierta que se presentará en España antes de la amnistía, tras el resultado de las elecciones, y que si lo detienen será por corto tiempo. Está tan seguro que recuerda a Sánchez que está en sus manos, o sea, que lo tiene “collat” y que por mucho que lo intente, depende de él la continuidad del Gobierno.
Y por parte del PSOE., acusa recibo del mensaje el ex presidente y cónsul ejerciente del chavismo, con frases no menos memorables que cuando decía que el concepto de nación es discutible y discutido, de cuando pactaba con Maragalll una España asimétrica y aceptaba sin conocerlo el Estatut que le mandaran de Cataluña. "En el Estado democrático de esta España cabe el reconocimiento nacional de todo lo que representa Cataluña y de su aspiración al autogobierno". Zapatero ha asegurado que “escucha, respeta y entiende a los que "tienen esos vínculos tan rotos con lo que significa la idea de España" en Cataluña”. Nada nuevo en su pensamiento. Y como el terreno está abonado para el referéndum de independencia, el independentismo se crece. Este licenciado en Derecho, que tardó diez años en hacer la carrera, se expresa como si fuera un denso constitucionalista que diseña no ya un estado plurinacional, como gusta decir, sino un remedo de los países balcánicos sin más.
Con el campo abonado, estos días, como era de esperar, el ex etarra y dirigente de BILDU, aprovechando el nuevo proceso del asesino Chapote, dice que como ETA ya no mata, hay que liberar a sus terroristas en la cárcel, porque ese paso forma parte de la normalidad política, liquidada esa parte del conflicto y que sus camaradas deben volver a casa. O sea, una nueva amnistía. Atentos a ello. Cabe preguntarse si Pedro Sánchez incluye en sus meditaciones ambos temas: Cómo complacer la hoja de ruta que le impone el fugado y los suyos, sin que se note mucho, y la creciente demanda de BILDU de que, tras resolver el conflicto catalán, hay que acometer el que cuelga de los votos de Bildu que también le son vitales para seguir en la Moncloa. Estos también tienen a Sánchez “Collat”. Aunque en euskera se dice “Harrapatúa”.
Y en ese sentido, su desafío al Estado y a sus instituciones está dejando, durante la campaña electoral una serie de expresiones que resumen su propia seguridad y la confianza de que, del mismo modo que se impuso la amnistía, vendrá el referéndum. Puigdemont advierte que se presentará en España antes de la amnistía, tras el resultado de las elecciones, y que si lo detienen será por corto tiempo. Está tan seguro que, tras recordarle a Sánchez que está en sus manos, desafía al Estado con toda prepotencia. De ahí que advierta que se presentará en España antes de la amnistía, tras el resultado de las elecciones, y que si lo detienen será por corto tiempo. Está tan seguro que recuerda a Sánchez que está en sus manos, o sea, que lo tiene “collat” y que por mucho que lo intente, depende de él la continuidad del Gobierno.
Y por parte del PSOE., acusa recibo del mensaje el ex presidente y cónsul ejerciente del chavismo, con frases no menos memorables que cuando decía que el concepto de nación es discutible y discutido, de cuando pactaba con Maragalll una España asimétrica y aceptaba sin conocerlo el Estatut que le mandaran de Cataluña. "En el Estado democrático de esta España cabe el reconocimiento nacional de todo lo que representa Cataluña y de su aspiración al autogobierno". Zapatero ha asegurado que “escucha, respeta y entiende a los que "tienen esos vínculos tan rotos con lo que significa la idea de España" en Cataluña”. Nada nuevo en su pensamiento. Y como el terreno está abonado para el referéndum de independencia, el independentismo se crece. Este licenciado en Derecho, que tardó diez años en hacer la carrera, se expresa como si fuera un denso constitucionalista que diseña no ya un estado plurinacional, como gusta decir, sino un remedo de los países balcánicos sin más.
Con el campo abonado, estos días, como era de esperar, el ex etarra y dirigente de BILDU, aprovechando el nuevo proceso del asesino Chapote, dice que como ETA ya no mata, hay que liberar a sus terroristas en la cárcel, porque ese paso forma parte de la normalidad política, liquidada esa parte del conflicto y que sus camaradas deben volver a casa. O sea, una nueva amnistía. Atentos a ello. Cabe preguntarse si Pedro Sánchez incluye en sus meditaciones ambos temas: Cómo complacer la hoja de ruta que le impone el fugado y los suyos, sin que se note mucho, y la creciente demanda de BILDU de que, tras resolver el conflicto catalán, hay que acometer el que cuelga de los votos de Bildu que también le son vitales para seguir en la Moncloa. Estos también tienen a Sánchez “Collat”. Aunque en euskera se dice “Harrapatúa”.
