Ello es un insulto más al sufrido pueblo de Venezuela. Tres personajes que apelan al olvido de su pasado para blanquear verdugos y convertirlos en gente de paz. Son malabaristas de la política o tránsfugas a sueldo para confundir y secuestrar conciencias. Pero la realidad los traiciona. A pesar de la gran ayuda que reciben, de ciertos y determinados medios de comunicación, ya hoy vendidos al mejor postor. O, mejor dicho, son los herederos disciplinados de la doctrina Allende, la ética del periodista de izquierdas debe estar siempre al servicio de la revolución… Palabras del mismo en el congreso celebrado en Chile, 1971. Santo y seña de nuevo comunismo disfrazado de demócratas, y muchos se lo creen.
Muchos y sonados ejemplos tenemos en España hoy, como las atrocidades cometidas por las bandas republicanas que provocaron la Guerra civil y que Franco les ganó. Hábilmente, no solo las escondieron en nuestra propia historia. Hoy, luego de ochenta años, se fotografían y airean con calaveras de difuntos sin identificar, para asustar y amenazar a la gente de bien y paz. Exhibiendo de nuevo su Frente Popular renovado y actualizado. Son los mismos que blanquearon a ETA y sus verdugos, conjuntamente con los golpistas catalanes, que solo buscan la destrucción de España, a los que Pedro Sánchez indultó y están pendientes de una amnistía general, obligando a todo el pueblo español a que aceptemos esta humillación, que será sin ninguna duda, el final de nuestro Estado de derecho democrático.
La situación de secuestro que hoy vive Venezuela, tiene sus responsables directos e indirectos, pero trabajando todos bajo una misma jerarquía, o una logia mafiosa de la narco guerrilla. Poderosa y peligrosa por su poder económico. Si recordáramos los personajes que se reunieron en Cartagena de Indias para avalar su blanqueo, podríamos sacar conclusiones de sus andanzas y como algunos compraron inclusive un premio Nobel y otros el poder. Hoy estos siniestros personajes se erigen en pacificadores, luego de esconder su pasado. Uno al frente del Foro de Sau Paulo, dirección oficial del nuevo comunismo, otro, guerrillero del M-19, hoy blanqueado, y el tercero de embajador itinerante de la “robolución” bolivariana.
Tal vez me faltó Ortega, otro más de la manada, que logró entrar en la cofradía oscura y benefactora del Papa Francisco. Le salió rana. Y son los católicos de alma, cuerpo y corazón quienes están pagando las consecuencias de sus malas compañías, hoy en Nicaragua. Mientras tanto, la prensa “comprada” va a lo suyo. Faltos de ética moral y profesional, rumbo al abismo…, pero eso sí, con bolsillo ancho y largo.
Todo está cuadrado para que las elecciones generales del mes de julio en Venezuela sean un nuevo paripé. Están preparando el terreno para ello. Los personajes arriba mencionados, con su corte de payasos invisibles, están haciendo su trabajo sucio y arriesgado. La historia de Venezuela es muy repetitiva desde los años treinta. Caracas, igual que Roma en su día, no paga traidores.
Tal vez el despertar de América Latina esté en marcha. Lo más triste es observar cómo en su gran mayoría, añoran a sus dictadores de antaño. La seguridad personal y jurídica, unida al progreso y bienestar de la familia, hoy, acosada y en franca descomposición. Ello hace crecer las dudas razonables en sus democracias, las que viven hoy secuestradas y mnipuladas por unos vendedores de relatos falsos populistas. El destino de Venezuela deben definirlo los venezolanos, sin interferencia de mercenarios.
Ello nos recuerdan pasajes oscuros de cómo se despilfarraron y entregaron sus recursos naturales, mientras sus hijos, hoy deben emigrar por el mundo. Porque su país fue invadido y secuestrado por forajidos indocumentados.
Muchos y sonados ejemplos tenemos en España hoy, como las atrocidades cometidas por las bandas republicanas que provocaron la Guerra civil y que Franco les ganó. Hábilmente, no solo las escondieron en nuestra propia historia. Hoy, luego de ochenta años, se fotografían y airean con calaveras de difuntos sin identificar, para asustar y amenazar a la gente de bien y paz. Exhibiendo de nuevo su Frente Popular renovado y actualizado. Son los mismos que blanquearon a ETA y sus verdugos, conjuntamente con los golpistas catalanes, que solo buscan la destrucción de España, a los que Pedro Sánchez indultó y están pendientes de una amnistía general, obligando a todo el pueblo español a que aceptemos esta humillación, que será sin ninguna duda, el final de nuestro Estado de derecho democrático.
La situación de secuestro que hoy vive Venezuela, tiene sus responsables directos e indirectos, pero trabajando todos bajo una misma jerarquía, o una logia mafiosa de la narco guerrilla. Poderosa y peligrosa por su poder económico. Si recordáramos los personajes que se reunieron en Cartagena de Indias para avalar su blanqueo, podríamos sacar conclusiones de sus andanzas y como algunos compraron inclusive un premio Nobel y otros el poder. Hoy estos siniestros personajes se erigen en pacificadores, luego de esconder su pasado. Uno al frente del Foro de Sau Paulo, dirección oficial del nuevo comunismo, otro, guerrillero del M-19, hoy blanqueado, y el tercero de embajador itinerante de la “robolución” bolivariana.
Tal vez me faltó Ortega, otro más de la manada, que logró entrar en la cofradía oscura y benefactora del Papa Francisco. Le salió rana. Y son los católicos de alma, cuerpo y corazón quienes están pagando las consecuencias de sus malas compañías, hoy en Nicaragua. Mientras tanto, la prensa “comprada” va a lo suyo. Faltos de ética moral y profesional, rumbo al abismo…, pero eso sí, con bolsillo ancho y largo.
Todo está cuadrado para que las elecciones generales del mes de julio en Venezuela sean un nuevo paripé. Están preparando el terreno para ello. Los personajes arriba mencionados, con su corte de payasos invisibles, están haciendo su trabajo sucio y arriesgado. La historia de Venezuela es muy repetitiva desde los años treinta. Caracas, igual que Roma en su día, no paga traidores.
Tal vez el despertar de América Latina esté en marcha. Lo más triste es observar cómo en su gran mayoría, añoran a sus dictadores de antaño. La seguridad personal y jurídica, unida al progreso y bienestar de la familia, hoy, acosada y en franca descomposición. Ello hace crecer las dudas razonables en sus democracias, las que viven hoy secuestradas y mnipuladas por unos vendedores de relatos falsos populistas. El destino de Venezuela deben definirlo los venezolanos, sin interferencia de mercenarios.
Ello nos recuerdan pasajes oscuros de cómo se despilfarraron y entregaron sus recursos naturales, mientras sus hijos, hoy deben emigrar por el mundo. Porque su país fue invadido y secuestrado por forajidos indocumentados.
