EL CONFLICTO DE LOS FERIANTES GITANOS

La 'guerra' entre zamoranos y el clan de los 'morones' llega a Redondela

La Policía identificó a unas cuarenta personas por el enfrentamiento que se vivió frente a  un colegio y a escasos metros de la Comisaría. // JV Landín
photo_camera La Policía identificó a unas cuarenta personas por el enfrentamiento que se vivió frente a un colegio y a escasos metros de la Comisaría. // JV Landín

Un enfrentamiento en la feria termina con 40 identificados y la incautación de barras de hierro y de palos

El conflicto que enfrenta a gitanos zamoranos y del clan de "los morones"  se extendió ayer a la feria de Redondela, donde un conato de reyerta terminó con varios identificados y el "éxodo" de parte de los protagonistas del conflicto. El mercadillo continuó con un 10% menos de puestos de lo habitual, mucho menos público y una fuerte presencia policial. En total, fueron identificadas unas cuarenta personas y los agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) se incautaron de un número indeterminado de barras de hierro, palos y otros objetos. No hubo detenidos. Este es el tercer incidente grave que se registra en poco más de un mes  en los mercadillos del área de Vigo tras la pelea registrad en octubre en Cangas y los disparos contra furgonetas de los zamoranos que regresaban a sus casas desde  el mercado semanal de Bouzas.
Los más de doscientos puestos de la feria de Redondela ultimaban el montaje cuando, sobre las nueve de la mañana, un grupo de personas pertenecientes al grupo conocido como los "morones" se acercó a uno de los puestos de los "zamoranos" con actitud desafiante y amenazadora, según relataron los testigos, que aseguraron también haber visto como se esgrimían barras y palos. La "bronca" fue subiendo de tono hasta que los agentes de la UPI se interpusieron entre los dos bandos para evitar el enfrentamiento directo. El despliegue policial -que se encontraba ya en el lugar como medida preventiva- terminó con la identificación de unas cuarenta personas. Los "zamoranos", por su parte, pidieron protección policial para desmontar sus puestos y abandonar Redondela. La caravana -unos 20 en total- abandonó la localidad con escolta de la Policía Nacional, a la que se sumó la Guardia Civil hasta Porriño, de donde son la mayoría de los integrantes de este grupo de ambulantes. En la feria quedó un furgón de la UIP y el helicóptero de  la Policía Nacional, que no dejó de sobrevolar la zona. 
Desde el Ayuntamiento de Redondela aseguraban que pese al incidente y al "bajón" que supuso en la asistencia de gente a la primera feria del mes, aún no han decidido "si se suspenderá o no la del día 21".  El concejal de Interior, Arturo González reconocía que "el gobierno local apenas tiene margen de maniobra en este conflicto, asegurando que lo único que pueden hacer es "solicitar mayores medidas de seguridad para evitar enfrentamientos",  como sucedía ayer, en que era evidente la presencia policial en el centro de Redondela. n

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