El Atlético de Madrid entregó ayer la Liga con un empate en el estadio Wanda Metropolitano cuando ya dio por ganado su partido frente al Girona (1-1), igualado por Portu en un fallo defensivo a quince minutos del final, cuando Diego Simeone ya había reemplazado a Diego Costa y Griezmann. Quizá estaba tan presente el encuentro decisivo del martes en la Copa ante el Sevilla, el hecho de dosificar esfuerzos en futbolistas determinantes, el sentir que la victoria, y era así por sensaciones, estaba encarrilada que el Atlético se olvidó unos instantes de la Liga. Y lo pagó: 1-1.
Atlético de Madird:
Oblak; Vrsaljko (Vitolo, m. 80), Savic, Giménez, Lucas; Correa, Saúl, Thomas, Carrasco; Griezmann (Koke, m. 69) y Diego Costa (Gameiro, m. 60).
Girona:
Bono (Gorka Iraizoz, m. 46); Aday Benítez, Juanpe, Bernardo Espinosa, Jonás Ramalho, Johan Mojica; Pere Pons, Àlex Granell (Timor, m. 84), Borja García, Portu; y Olunga.
Goles:
1-0, m. 34: Griezmann culmina un pase de cabeza de Diego Costa. 1-1, m. 75: Portu remacha un cabezazo de Bernardo.
Árbitro:
De Burgos Bengoetxea, del comité vasco. Amonestó a los locales Thomas (m. 45), Vrsaljko (m. 65), Giménez (m. 81) y Oblak (m. 90) y a los visitantes Juanpe (m. 30), Aday Benítez (m. 37) y Bernardo (m. 81).