Parte de la afición presente ayer en Balaídos mostró su malestar por las normas impuestas por la Liga desde la llegada de Javier Tebas a la presidencia y que han complicado sobremanera el acceso a los estadios. Un sector de la hinchada celeste guardó silencio durante el himno del Celta como señal de protesta –hubo quien incluso silbó a los que cantaban– y después hubo una sonora pitada cuando los marcadores mostraron un mensaje de la Liga. Además, en el minuto 12 se cantó el ya habitual "Tebas, vete ya".