Con el inicio de una nueva temporada y los cambios habidos en la plantilla, hay detalles que tienen que modificarse.
Uno de los muchos es la elección de los centradores en las acciones a balón parado, ya sea saques de esquina o faltas cerca del área rival. El pasado sábado ante el Espanyol, tras la salida del equipo de Daniel Wass, Antonio Mohamed nombró a nuevos célticos para asumir tal tarea: Brais Méndez, si la acción se produce por la izquierda, y Hugo Mallo, si es por la derecha.
El mosense estaba acostumbrado a asumir ese papel en el filial y, si está en el campo, es el sacador elegido desde la izquierda a pierna natural por delante de Iago Aspas. Con Brais en el campo, el moañés se sitúa en el área para intentar aprovechar su talento hacia la portería rival.
Más extraña que Mallo realice tal labor, aunque forma parte del crecimiento que año a año realiza el capitán, asumiendo cada vez más labores. Amo y señor de la banda derecha –Mohamed repite la idea de Berizzo y Unzué de un equipo asimétrico, dejándole el carril derecho al marinés–, ahora asume otro papel principal tras una pasada temporada en la que dio más asistencias de gol que nunca en su carrera.
