Opinión

La porra

Otro de los clásicos de las fiestas navideñas, tanto como los villancicos, las cenas con amigos, el esquinazo al cuñado son las porras que se organizan en todo tipo de establecimientos donde se sortean cestas con licores, embutidos, turrones, peladillas y mazapanes y en la que no falta el jamón, de mayor o menor calidad según el importe de la apuesta. Son sobre todos bares y ultramarinos de barrio los lugares donde las casillas del cartelón con los números del 00 al 99 se van rellenando con firmas a la espera de los niños de San Ildefonso. Los policías de Murcia han encontrado, sin embargo, una porra singular en un local donde se trapicheaba con droga porque el premio consistía en un variado de drogas legales e ilegales, cocaína, hachís, alcohol, tabaco, dinero en efectivo para seguir consumiendo en el garito y, cómo no, un jamón de ocho kilos. Una ‘narcocesta’ completa por cinco euros la apuesta que no solo se va a quedar sin ganador, sino que puede ofrecer pistas a los investigadores sobre los clientes del local.    

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