El Berbés, la que se denomina como “La Ribera del Berbés”, que es el inicio del núcleo urbano de Vigo, se construyó un edificio por la Universidad de Vigo, la sustitución de los edificios números 11, 13 y 15 del Plan Especial del Casco Vello, que para definirlo y sintetizar sus características, se refleja en un artículo de Ceferino de Blas, cronista oficial de la Ciudad, como un proyecto vanguardista con 380 metros de madera contralaminada en la fachada, uno de los primeros edificios públicos que utiliza ese material para su construcción, traído de Austria, que no tiene relación con los edificios que sustituyó, y el conjunto del núcleo del Berbés con sus soportales y balconadas icono de la ciudad de Vigo y que no se rehabilitó por tanto, en el marco histórico de La Ribera, que nos recuerdan los grabados y las fotografías que todavía ahora se publican del recuerdo histórico del Bebés, y que se destina para sede y oficinas del Rectorado de la Universidad de Vigo.
En un periódico, el 17 de octubre de 2020, se publicaba una denuncia de la Asociación de Vecinos del Casco Vello sobre las indicadas obras de rehabilitación en O Berbés, señalando que no se han respetado los elementos arquitectónicos originales, alteración de la fachada, eliminación de uno de los dos canzorros y cortaron otro, tampoco repusieron una solana del balcón que ha quedado con una superficie irregular y sin su balaustrada original.
En una visita a las obras de la edificación, el arquitecto autor del proyecto y representantes de la Universidad, el Presidente del Colegio de Arquitectos reivindicó la “increíble capacidad” de los arquitectos para diseñar “el mundo soñado en el que queremos vivir”, y no se trata en la reconstrucción y rehabilitación de un edificio con ensueño, sino con la realidad a la que hay que atenerse.
Y a lo que hay que atenerse es a la observancia del Plan Especial del Casco Vello, con sus Ordenanzas, que manifiesta que han de conservarse las fachadas existentes y rehabilitarse con los mismos materiales, y en caso de autorizarse la reconstrucción, en el supuesto de que no se pudiese afrontar la reconstrucción de otra manera de alguna fachada, debe conservar el mismo aspecto que tenía anteriormente, con todos sus elementos. Si la edificación estuviese en ruina, ya que en este caso las viviendas de referencia estaban prácticamente en ruina económica y estructural, las fachadas exteriores deberán repetirse con el aspecto íntegro, con mantenimiento de cada uno de los elementos, y utilizarán materiales idénticos.
En el Ayuntamiento hubo un momento en que la Comisión de seguimiento del citado Plan, era extremadamente exigente para la modificación de un simple clavo; pero actualmente, con los informes que da también, para la rehabilitación de viviendas en el Plan Especial de Edificios a Conservar, hace de mangas capirote, y admite las tendencias del autor de los proyectos técnicos de rehabilitación que están en contradicción con el planeamiento; informes y concesión de las correspondientes licencias de obras de rehabilitación, que tienen la correspondiente responsabilidad.
En un informe sobre la modificación de un Museo determinado, de la Academia de Bellas Artes de San Fernando, manifiesta que el proyecto ganador debe ajustarse al cumplimiento fiel de la normativa urbanística, en este caso, el Plan Especial del Casco Vello, en otras palabras, dice en lugar de ajustarse el edificio a la ciudad, es la ciudad consolidada la que se acopla al edificio del autor del proyecto, inédito principio urbanístico; y que el fallo de un jurado a un proyecto determinado no puede fundamentar la decisión en virtud del parecer del autor del proyecto, no puede tomarse dicho parecer como principio legal. La anterior cuestión se enlaza en estos momentos con un cambio de criterio de la Universidad de llevar los centros de enseñanza al centro de la Ciudad, como dice estos días la prensa, destinar los edificios de juzgados de Coia a facultades, o de la compra del edificio de Zona Franca en López Mora, y es un asunto que no puede resolverse, simplemente, ya que se construyó la Ciudad Universitaria en el Campo das Lagoas, partiendo del CUVI en unos terrenos comunales, que en aquel momento disponía gratis el Ayuntamiento, y que se amplió con un enorme gasto en expropiaciones, construcción de edificios, con proyectos de arquitectos de renombre nacional e internacional, centro comercial, campos de deportes, incluso el Rectorado con un campus concentrado en un perímetro de 8 kilómetros, para quedar ahora en desuso y unos edificios no utilizados que quedarán abandonados y originando su deterioro; y además, con un equipo de gobierno actual que hizo enseña de su mandato, manifestando que no estaba en la política del “ladrillo”, y con una institución, la Universidad, que no cuenta con muchos fondos dada la continua demanda del Consejo de Rectores al Ministerio de Educación de aumento de las aportaciones económicas para atender sus necesidades; y por otra parte, trasladando el Campus dentro de la ciudad, originaría un campus con unos edificios repartidos por toda la ciudad
Personalmente, me gustaría una Universidad más próxima a Vigo y con otro emplazamiento, pero hay que partir de la realidad y tirar un dinero invertido que es riqueza acumulada; y por lo menos sin un gran debate con la sociedad, así como de los estudios económicos y de planificación sobre la conveniencia o inconveniencia del cambio; y por otra parte la Universidad no hizo ninguna aportación para llevar a la población de Vigo a la Universidad, con días de Campus abierto, con la realización de determinadas actividades o de cualquier otra forma para dar a conocer la Universidad y su uso por la población en general.
La distancia a la ciudad es un argumento factible, pero no muy importante, ya que, por ejemplo en Madrid, la Universidad Carlos III, la Juan Carlos I, la Camilo José Cela, la Politécnica, la Nebrija, la Autónoma, etc., están muy distantes de la ciudad de Madrid; y el Campus de Lagoas que comenzó sus actividades con unas vías de comunicación muy malas, actualmente cuenta con buenas vías de acceso y transporte.
En un periódico, el 17 de octubre de 2020, se publicaba una denuncia de la Asociación de Vecinos del Casco Vello sobre las indicadas obras de rehabilitación en O Berbés, señalando que no se han respetado los elementos arquitectónicos originales, alteración de la fachada, eliminación de uno de los dos canzorros y cortaron otro, tampoco repusieron una solana del balcón que ha quedado con una superficie irregular y sin su balaustrada original.
En una visita a las obras de la edificación, el arquitecto autor del proyecto y representantes de la Universidad, el Presidente del Colegio de Arquitectos reivindicó la “increíble capacidad” de los arquitectos para diseñar “el mundo soñado en el que queremos vivir”, y no se trata en la reconstrucción y rehabilitación de un edificio con ensueño, sino con la realidad a la que hay que atenerse.
Y a lo que hay que atenerse es a la observancia del Plan Especial del Casco Vello, con sus Ordenanzas, que manifiesta que han de conservarse las fachadas existentes y rehabilitarse con los mismos materiales, y en caso de autorizarse la reconstrucción, en el supuesto de que no se pudiese afrontar la reconstrucción de otra manera de alguna fachada, debe conservar el mismo aspecto que tenía anteriormente, con todos sus elementos. Si la edificación estuviese en ruina, ya que en este caso las viviendas de referencia estaban prácticamente en ruina económica y estructural, las fachadas exteriores deberán repetirse con el aspecto íntegro, con mantenimiento de cada uno de los elementos, y utilizarán materiales idénticos.
En el Ayuntamiento hubo un momento en que la Comisión de seguimiento del citado Plan, era extremadamente exigente para la modificación de un simple clavo; pero actualmente, con los informes que da también, para la rehabilitación de viviendas en el Plan Especial de Edificios a Conservar, hace de mangas capirote, y admite las tendencias del autor de los proyectos técnicos de rehabilitación que están en contradicción con el planeamiento; informes y concesión de las correspondientes licencias de obras de rehabilitación, que tienen la correspondiente responsabilidad.
En un informe sobre la modificación de un Museo determinado, de la Academia de Bellas Artes de San Fernando, manifiesta que el proyecto ganador debe ajustarse al cumplimiento fiel de la normativa urbanística, en este caso, el Plan Especial del Casco Vello, en otras palabras, dice en lugar de ajustarse el edificio a la ciudad, es la ciudad consolidada la que se acopla al edificio del autor del proyecto, inédito principio urbanístico; y que el fallo de un jurado a un proyecto determinado no puede fundamentar la decisión en virtud del parecer del autor del proyecto, no puede tomarse dicho parecer como principio legal. La anterior cuestión se enlaza en estos momentos con un cambio de criterio de la Universidad de llevar los centros de enseñanza al centro de la Ciudad, como dice estos días la prensa, destinar los edificios de juzgados de Coia a facultades, o de la compra del edificio de Zona Franca en López Mora, y es un asunto que no puede resolverse, simplemente, ya que se construyó la Ciudad Universitaria en el Campo das Lagoas, partiendo del CUVI en unos terrenos comunales, que en aquel momento disponía gratis el Ayuntamiento, y que se amplió con un enorme gasto en expropiaciones, construcción de edificios, con proyectos de arquitectos de renombre nacional e internacional, centro comercial, campos de deportes, incluso el Rectorado con un campus concentrado en un perímetro de 8 kilómetros, para quedar ahora en desuso y unos edificios no utilizados que quedarán abandonados y originando su deterioro; y además, con un equipo de gobierno actual que hizo enseña de su mandato, manifestando que no estaba en la política del “ladrillo”, y con una institución, la Universidad, que no cuenta con muchos fondos dada la continua demanda del Consejo de Rectores al Ministerio de Educación de aumento de las aportaciones económicas para atender sus necesidades; y por otra parte, trasladando el Campus dentro de la ciudad, originaría un campus con unos edificios repartidos por toda la ciudad
Personalmente, me gustaría una Universidad más próxima a Vigo y con otro emplazamiento, pero hay que partir de la realidad y tirar un dinero invertido que es riqueza acumulada; y por lo menos sin un gran debate con la sociedad, así como de los estudios económicos y de planificación sobre la conveniencia o inconveniencia del cambio; y por otra parte la Universidad no hizo ninguna aportación para llevar a la población de Vigo a la Universidad, con días de Campus abierto, con la realización de determinadas actividades o de cualquier otra forma para dar a conocer la Universidad y su uso por la población en general.
La distancia a la ciudad es un argumento factible, pero no muy importante, ya que, por ejemplo en Madrid, la Universidad Carlos III, la Juan Carlos I, la Camilo José Cela, la Politécnica, la Nebrija, la Autónoma, etc., están muy distantes de la ciudad de Madrid; y el Campus de Lagoas que comenzó sus actividades con unas vías de comunicación muy malas, actualmente cuenta con buenas vías de acceso y transporte.
