En relación a resultados del PP entre las elecciones generales de julio y las autonómicas de marzo de 2023, en cuanto a la diferencia del número de votos se hacen diversas conjeturas, por ejemplo, España pidió moderación, entre PP-PSOE ganaron 4 millones de sufragios, de los que 2,36 millones no procedían de Ciudadanos; en entrevista al jefe de la Agencia GAD3 por su equivocación sobre las encuestas, lo achaca a que si VOX no se hubiese presentado en algunas circunscripciones en las que no iba a ganar, favorecería al PP; la remontada del PSOE en el último tramo del periodo previo a la votación; y nadie se fija en el candidato del PP, Feijóo, que se presentaba por primera vez en unas generales; yo creo que el candidato tuvo mucho que ver entre la diferencia de voto del PP, de las autonómicas a las generales; por ejemplo, Madrid el 40.51% de votos en las generales, en las autonómicas el 46.60%, Extremadura, 37,94% en las generales, en las autonómicas 38.97%; Valencia, generales 34,90%, autonómicas 35.03%, pero el PSOE en Valencia pasó del 28.67 de las autonómicas al 32.12 en las generales, pese a que VOX bajó en las generales. Quiso realizar la cuadratura del círculo, permitiendo que se disputaran en las diferentes comunidades autónomas las relaciones con VOX, dando aspecto de inseguridad al no tener una línea prevista, unas le ponían reparos a VOX, Murcia no dio entrada a VOX en el gobierno hasta el último momento, en cambio Valencia lo hizo desde el minuto uno; en la campaña electoral decía que no quería entenderse con VOX, como si no necesitase de su concurrencia para el gobierno, diciendo que prefería gobernar con el PSOE, que es el PSOE de Sánchez; la duda en el PP en cuanto a la actualización de las pensiones, hay que decir que el PP no aplica el IPC en su actualización, como hace el PSOE, no va a ganar, pues es un colectivo cada vez más numeroso; no haber concurrido al segundo debate electoral entre los candidatos, como si estuviese por encima del debate; el equipo que trajo de Galicia no tiene peso, sólo una adhesión al candidato. VOX no es un partido de extrema derecha, como dice el PSOE para asustar al PP, e Isabel Díaz Ayuso apoya a VOX, es un partido defensor del Estado de derecho, como acreditó con los recursos interpuestos sobre el estado de alarma y su prórroga y sobre el control del Parlamento por la oposición al ejecutivo, ante el TC; VOX defiende también el derecho a la vida, un derecho fundamental, en contra de Feijóo, que mostró su conformidad a la última sentencia sobre los plazos de interrupción del embarazo, y VOX una escisión del PP por no estar conforme con la actuación del mismo en importantes asuntos programáticos, y si quiere recuperar el electorado de VOX, debe empezar por acoger algunos de sus postulados; no seguir una política de seguidismo que, a veces, hace el PP de la política del PSOE. Feijóo últimamente es más contundente pero el PP tendrá que cambiar su estrategia.
