La Unidade Asistencial de Drogodependencia instalada en Cangas pese a que da cobertura también a los municipios de Moaña y Bueu vuelve a quedarse sin médico psiquiatra porque la convocatoria abierta por el consistorio ha quedado desierta. Lleva así desde octubre de 2022 cuando se jubilaron los dos profesionales que ocupaban este puesto. Esto genera un problema para las personas con problemas de drogadicción a las que atiende el centro y que cuentan con patologías psiquiátricas derivadas del consumo de sustancias estupefacientes. Desde hace año y medio es el centro de salud de Cangas quien se encarga de “cubrir” esta carencia cuando se trata de usuarios censados en este municipio o en Moaña. La Unidad de Salud Mental instalada en este consultorio ajusta los tratamientos de los pacientes para darle continuidad al tratamiento y priorizar su salud. Sin embargo, no ocurre lo mismo con los que proceden de la localidad vecina, Bueu. Pese a que están obligados a recibir atención en la UAD de la demarcación de la comarca del Morrazo, al pertenecer a otra área sanitaria, la de Pontevedra, no pueden ser atendidos desde el Área Sanitaria de Vigo porque administrativamente su asistencia sanitaria corresponde al Área de Pontevedra.
Según profesionales consultados, el motivo de que esta plaza lleve vacía desde finales de 2022 está en las condiciones del contrato, poco atractivas para los aspirantes e incompatibles con los servicios en la administración pública. Según la concelleira de Servicios Sociales, Leonor Gala, se debe a la escasez de médicos psiquiatras aunque reconoce que “mejoraría la situación de las UAD si se integrasen en el Sergas”. “El procedimiento lleva parado más de un año”, lamenta la edil canguesa.
La gestión de la UAD en la comarca depende del Concello de Cangas, aunque dispone de colaboración económica de la Xunta. Eso sí, desde los gobiernos locales indican que resulta insuficiente para su mantenimiento. Sí cuenta con un coordinador, dos enfermeras, un técnico en drogas y auxiliares.
