Según el documento diseñado por el Gobierno, entre los cambios que el Ejecutivo español ofrece a la Comisión Europea en el marco del Plan de Recuperación y Resiliencia se encuentra la ampliación del periodo de cálculo de las pensiones, el destope de las bases máximas y la sustitución del llamado factor de sostenibilidad, actualmente en suspenso, por un "mecanismo de equidad intergeneracional" que tenga en cuenta otros factores además de la evolución de la esperanza de vida.
El resto de las propuestas enviadas a Bruselas son conocidas: vincular pensiones al IPC; aproximar la edad efectiva de jubilación a la edad legal mediante el freno a las jubilaciones anticipadas e incentivos al retraso de la jubilación; descargar de gastos impropios al sistema para traspasárselos al Estado; establecer un sistema de cotización para los autónomos en función de sus ingresos reales; modificar el complemento de maternidad de las pensiones, y revisar e impulsar los sistemas complementarios de pensiones.
El Gobierno deja fuera del texto una posible extensión hasta los 35 años, una medida que generó gran polémica y rechazo en Podemos. En concreto, lo que propone el Gobierno es ampliar el periodo de cálculo de forma gradual pero permitiendo al mismo tiempo que puedan descartase del cómputo los peores años de cotización.n