El astillero vigués San Enrique, antigua Factorías Vulcano, se diversifica y abre un nicho de mercado en el sector de la automoción con la fabricación de un túnel climático de viento para un fabricante de coches europeo. La construcción generará carga de trabajo durante ocho meses para unas 50 personas (subcontratas incluidas) que espera tener a finales de junio. La obra se iniciará de manera inmediata en los terrenos privados del astillero en Teis, según informó ayer la compañía.
El túnel de viento fue desarrollado por la ingeniería española +D, experta en sistemas de ensayos especiales y ubicada en Madrid, y será el astillero vigués el encargado de su fabricación. Se trata de un túnel experimental que permitirá realizar ensayos a escala real para comprobar el comportamiento de vehículos eléctricos en condiciones climáticas extremas, de hasta temperaturas a 35 grados bajo cero. Se trata del equipo más moderno del mundo de sus características pero, por cuestiones de confidencialidad con el cliente, la compañía no ha podido desvelar detalles del contrato que permitirá la reactivación del antiguo Vulcano.
San Enrique, que pertenece al grupo Marina Meridional, retomará la actividad con otro pedido formalizado recientemente para la construcción de un pesquero de 80 metros de eslora por 35 millones para la armadora PescaChile. La compañía está negocianddo más carga de trabajo tanto de nueva construcción naval como industrial ya que ahora puede operar en los antiguos terrenos de Vulcano tras dar el visto bueno definitivo de la Autoridad Portuaria al otorgamiento de la concesión administrativa por un plazo de 15 años. Tal y como figura en los pliegos de la cesión de las instalaciones, la empresa comprometió una inversión de 1,6 millones de euros.
El último barco en construcción fue el ferri ‘Villa de Teror’ que contrató Vulcano en 2018 y que supuso la liquidación del astillero de Teis tras 100 años de historia y su reconversión posterior en San Enrique.
