Cambio de caras y posiciones
Tras la goleada del sábado al Alavés, Óscar García Junyent introdujo solamente tres cambios en el once, uno por línea, aunque algunos jugadores que repitieron modificaron también sus posiciones. El técnico celeste apostó por Aidoo en el centro de la zaga para dar descanso a Araujo, puso a Bradaric por el sancionado Okay como pivote y colocó a Santi Mina en punta, en lugar de Smolov. Además, Beltrán y Rafinha intercambiaron sus puestos en el centro del campo, con el madrileño ayer por la izquierda y el hispano-brasileño, por la derecha.
Dominio alterno
En la primera parte, la Real Sociedad y el Celta se repartieron el dominio del juego. El equipo local salió más fuerte y se adueñó de la pelota en los primeros instantes. Un error de Beltrán en el pase nada más empezar pudo costarle caro al conjunto celeste, pero Januzaj se precipitó en el remate y Rubén desvió con seguridad. Un remate de Mikel Merino tras un saque de falta y una jugada de Odegaard por la izquierda inquietaron a un Celta que poco a poco se fue quitando la presión y se empezó a parecer al del sábado pasado, con presión alta y más tiempo de posesión.
De Rafinha a Aspas
La primera parte se encaminaba hacia el empate cuando Rafinha arriesgó con la pelota en la frontal del área celeste, envió un medido pase a Denis y la jugada terminó con un penalti provocado y convertido en gol por Iago Aspas.
El peligro de Januzaj
En la segunda parte, la Real buscó el empate desde el principio y encerró al Celta en su campo. Januzaj, por la banda derecha, dio problemas a Olaza, que encontró la ayuda de los centrales y hasta de Nolito.
Cambio de dibujo
Óscar García encontró la manera de frenar al equipo local con un cambio de dibujo, tras perder por distintos problemas a Beltrán y a Bradaric. Del 4-3-3, el Celta pasó a un 5-4-1 con la entrada de Araujo como tercer central y de Jorge Sáenz como pivote. Rafinha, Brais y Nolito completaron la línea medular, con Smolov en punta. n
