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"Podría haber estado en el podio"

Oliveira estuvo con los mejores en las subidas más duras de la Volta a Galicia tras bajar cinco kilos.
photo_camera Oliveira estuvo con los mejores en las subidas más duras de la Volta a Galicia tras bajar cinco kilos.
El porriñés Rubén Fernández Oliveira, de 41 años, fue el mejor gallego de la Volta y terminó quinto en la general
El porriñés Rubén Fernández Oliveira, a sus 41 años, volvió la pasada semana a competir en Élite para disputar la Volta a Galicia y completó la prueba autonómica con un notable resultado: quinto en la general y con el maillot azul de mejor gallego. "Me habían propuesto correr en el Spol pero al final no sacó equipo, así que me puse a buscar por mi cuenta y como conozco a Javier Fernández –directo del Alca redondelano– lo llamé y me dijo que sí, que le hacía falta gente", explica Oliveira sobre la oportunidad de correr en la Volta. Fue, según dice él, "un poco casualidad", pues no lo tenía planificado y le coincidió con un parón en el trabajo. 
Para prepararse para la ronda autonómica, Fernández Oliveira tuvo que cambiar drásticamente sus rutinas de entrenamiento, pasando de hacer unos 350 kilómetros semanales para preparar las carreras de categoría Máster a recorrer unos 700 u 800 con el doble de intensidad. Además, indica, "tuve que bajar cinco kilos porque sabía cómo era la Volta. Tenía unos tres o cuatro más de margen, pero no pude adelgazar más. Para llegar más fino tenía que haber tenido más tiempo de preparación". Y es que el porriñés se entrenó con sólo mes y medio de antelación. "Fui prácticamente sin competir –recuerda–. Hice el Campeonato de España Máster y una carrera en Pontevedra, y en ambos fui segundo. En dos meses solamente corrí dos pruebas".
Oliveira afrontó el reto de la Volta a Galicia con un temor: los tiempos de recuperación. Y es que, con 41 años y acostumbrado a carreras de 80 kilómetros, no sabía muy bien cómo le respondería el cuerpo. Por esa razón, el porriñés se tomó el entrenamiento muy en serio: "Yo al final estaba bien. Fui a más durante la Volta, pero entrené como nadie. No creo que ningún élite entrenase lo que yo y no creo que pudiese rendir mejor de lo que lo hice. Si la contrarreloj no hubiese sido por equipos, podría haber estado más cerca de los primeros, incluso en el podio", explica. El Alca contaba con muchos corredores de primer año que no tenían la experiencia y el entrenamiento de equipos como el Lizarte –muy ligado al Movistar– o el Kometa –equipo de la Fundación Alberto Contador–. Sin embargo, su gran preparación le permitió meterse en el grupo de cabeza que coronó en la última etapa el Alto de San Roque, que contaba con rampas de un 15 por ciento de desnivel, para cruzar segundo la meta y convertirse en el mejor gallego de la carrera, quinto en la general.
Roberto Mediero y Jacobo Ucha, dos de los grandes protagonistas de la prueba autonómica, son los habituales compañeros de entrenamiento de Rubén Fernández Oliveira. Según el porriñés, "ellos fueron los más valientes en la carrera. Arriesgaron en todo momento, pero no tuvieron la colaboración de algún equipo que fuese tan ambicioso como ellos. El Vigo Rías Baixas, por ejemplo, no arriesgó nada. A l menos, a ellos dos les salió bien. Ganaron una etapa y en la última pusieron contra las cuerdas al Lizarte, que estuvieron a poco de perder la vuelta". Oliveira califica su actuación de "carrerón". Incluso bromea: "No los vi andar tanto en mi vida". Los dos ciclistas del Vigués se escaparon en las dos últimas etapas, cosechando un doblete en Curtis el sábado, pero el domingo su esfuerzo no tuvo recompensa, pues el pelotón los alcanzó justo antes de subir el Alto de San Roque. Mediero y Ucha tuvieron que tirar prácticamente solos del grupo de la fuga durante los 80 kilómetros en los que el segundo de ellos fue líder virtual para acabar muriendo en la orilla. Un esfuerzo que sus compañeros, como Fernández Oliveira, aplauden tras la disputa de una Volta a Galicia especialmente dura.n

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