nnnDesde que el añorado Michael Krohn-Dehli se dejó ver por estos lares en el verano de 2012, justo después del ascenso a Primera, Dinamarca ha sido un país presente en la plantilla del Celta y con peso. El mercado del país nórdico fue explotado a conciencia –incluso llegó un checo como Stanislav Lobotka– en los últimos años con aciertos más que sonoros y algunos errores. Pero esa era danesa en el vestuario parece ir tocando a su fin. Así, esta semana, el club vigués ha cerrado el traspaso de dos de ellos: Mathias Jensen al Brentford el pasado miércoles y, ayer mismo, Andrew Hjulsager al Oostende. Restan en el plantel dos compatriotas más, Emre Mor y Pione Sisto, pero ninguno de los dos tiene clara su continuidad de cara a la inminente temporada.
La salida de Hjulsager estaba pactada desde hace meses. El jugador, que llegó a Vigo hace dos temporadas y media, nunca logró convencer a ninguno de los técnicos que tuvo bajo sus órdenes, aunque todos alabaron su actitud de trabajo. En total, ha disputado 28 partidos con el equipo vigués, apenas 9 de ellos como titular y sólo ha marcado un gol, aunque este último curso sí vivió una fase en la que sobresalió con sus asistencias. Tras el final de curso y teniendo en cuenta que encaraba su último año de contrato con el Celta, las dos partes buscaron una salida.
El Oostende belga, con el que firma por dos temporadas con opción a una tercera, será finalmente su destino por una cantidad que no supera, de largo, el millón de euros. Eso sí, el Celta se reserva un porcentaje sin especificar de una futura venta.
Quedan dos de seis
Cuando Krohn-Dehli se fue en 2015, llegó Daniel Wass para dejar también un magnífico rendimiento. Con él todavía dentro, se unieron Pione Sisto, Andrew Hjulsager y Emre Mor –danés de nacimiento, aunque internacional turco–. Ya el verano pasado, cerró el cupo Mathias Jensen. Ahora, sólo quedan dos. Y Mor buscando equipo por Turquía. Y Pione sin tener garantizado seguir.n
