La gaviota patiamarilla es la especie más abundante en el Centro de Recuperación da Fauna
Cotorredondo es el único lugar de referencia para la recuperación de fauna salvaje en la provincia (a excepción de Cemma, Coordinadora para o Estudio dos Mamíferos Mariños, con sede en Gondomar). Concellos, profesionales y fuerzas seguridad envían a sus instalaciones los ejemplares heridos para su cura y su posterior puesta en libertad.
Gestionado desde la Consellería de Medio Ambiente, en los siete primeros meses del año ha recibido desde Vigo 236 animales, lo que supone un 27,5% de los ingresos totales de este periodo, unos 860. Como en los cómputos globales, desde esta ciudad la mayoría corresponden a las aves, con 222 casos, y una vez más, la especie dominante es la gaviota patiamarilla, de las que llegaron al centro 140. El descenso de población detectado en las colonias de Cíes, con un último recuento de 10.000 parejas. Eso, unido a la campaña de control de huevos en la ciudad han contribuido a la bajada de los ingresos. En el mes de julio, coincidiendo con el periodo de cría, aumentan los avisos de polluelos caídos del nido, que son una especie protegida.
Alas rotas, choques contra ventadas o heridas ocasionadas por aparejos de pesca o basura en el mar son los principales motivos de su estancia en Cotorredondo. Una vez, restablecidos de sus dolencias, se ponen en libertad en lugares próximos a las colonias. En el caso de los polluelos, cuando pueden valerse por si mismo uno de los puntos de sueltas es Cabo Udra. Desde el Centro de Recuperación se atiende a los animales, evitando que se acostumbren a los cuidadores para que puedan retomar su vida en estado salvaje. Este año en Vigo se han recogido y enviado a Cotorredondo otros ejemplares de aves como vencejos, azores, distintos tipos de búho, mirlos y urracas, especies que residen durante todo el año en los parques de la ciudad y en el cinturón verde que la rodea.
Por número, el siguiente tipo en importancia de fauna salvaje heridos en el término municipal vigués son los mamíferos: cuatro erizos y seis zorros. En cuanto a reptiles, hasta finales de agosto solo llegaron al Centro de Recuperación cinco reptiles: dos salamanquesas, un galápago autóctono y dos tortugas de Florida. Los motivos más frecuentes de sus ingresos son los atropellos, la debilidad o por orfandad.
A nivel global, en 2016 Cotorredondo atendió a 860 animales, un 88% de aves, el 7,7% de mamíferos y un 4,5% de reptiles. Durante el verano, el número de ingresos aumenta, suponiendo una proporción del 44% del cómputo anual.
Si se encuentra a un animal salvaje herido o enfermo hay que comunicarlo, en el caso de Vigo, o directamente a Cotorredondo o a través de la delegación provincial de la Consellería de Medio Ambiente, del Servicio de Protección a la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona), desde el Concello (llamando al 010) o avisando a emergencias en el 112. Poseer un animal salvaje supone una infracción a la Lei 9/2001 de la Conservación da Natureza.
