La Comisión Europea informó ayer de que ha solicitado a las compañías Meta, propietaria de Instagram, WhastApp y Facebook, y Snap que presenten antes del 1 de diciembre información precisa sobre las medidas que están tomando para cumplir con las nuevas reglas de la Unión Europea que obligan a los gigantes tecnológicos a proteger a los usuarios menores de edad frente a riesgos para su salud mental o física.
Una vez recibidas las respuestas, el Ejecutivo comunitario evaluará cuáles son los siguientes pasos a seguir, incluida la posibilidad de abrir un expediente sobre la base de la nueva Ley de Servicios Digitales que prevé incluso sanciones para los casos más graves de infracción.
La Comisión podría activar también un mecanismo para imponer medidas coercitivas si no ve atendidas sus demandas de información en los plazos previstos.
Al margen de este proceso, Meta ya está siendo motivo de examen por parte de Bruselas por el cumplimiento de las normas comunitarias contra la difusión en grandes plataformas de contenidos terroristas y violentos o difusión de discursos de odio y de bulos.
La exigencia coincide con el día en que España suscribió, junto a Australia, Dinamarca, Estonia, Francia, Alemania, Países Bajos, Reino Unido y Bélgica, una declaración para impulsar iniciativas globales dirigidas a reforzar la protección online de los menores.
El consenso en torno al impulso de la protección online de los menores se ha alcanzado “ante la cada vez mayor exposición de los menores a contenidos nocivos”. Asimismo, España se ha adherido al Laboratorio para la protección de los menores en Internet, creado por Francia en 2022.
