El papa leerá este jueves en la basílica de San Pedro la bula de convocatoria del Jubileo de 2025 con la que dará a conocer las fechas de inicio y conclusión de este gran evento católico para el que se esperan cerca de 35 millones de visitantes en Roma.
Está previsto que Francisco presida el acto solemne de entrega y lectura de la bula, con la que se dará a conocer el día exacto de inicio del Jubileo 2025 y también su conclusión. El acto tendrá lugar en el contexto de las Segundas Vísperas de la Solemnidad de la Ascensión del Señor. Las bulas se identifican por las primeras palabras latinas que tienen.
Por ejemplo, san Juan Pablo II convocó el Gran Jubileo del año 2000 con la bula “Incarnationis mysterium” (El Misterio de la Encarnación), mientras que el papa Francisco convocó el Jubileo Extraordinario de la Misericordia (2015-2016) con la bula “Misericordiae vultus” (El rostro de la misericordia).
A esos documentos se les llama “bula” por tener un sello de plomo con la imagen de los santos apóstoles Pedro y Pablo. Esta bula o sello se unía al documento por una cinta. A partir del siglo XIII el término bula deja de hacer referencia al sello para pasar a describir al propio documento. Posteriormente, en el siglo XV se reservó el uso del nombre bula únicamente para los documentos papales que se refieren a concesión de gracias.
Las bulas comienzan con el nombre del papa (sin el numeral), seguido de su dignidad de episcopus (obispo) y el título de servus servorum Dei (siervo de los siervos de Dios). Por ejemplo, en el caso del actual papa es Franciscus, episcopus, servus servorum Dei.
Epifanía 2024
En la Epifanía 2024 se hizo el anuncio de las fiestas movibles del año. Una de ellas es la de la Ascensión, que este año se celebra el 9 de mayo (o 12 de mayo, donde se traslada). Según confirmó el pro-prefecto del Dicasterio para la Evangelización del Vaticano, monseñor Rino Fisichella, principal responsable de la coordinación del gran evento católico, el Jubileo del 2025 arrancará con la apertura de la Puerta Santa de la basílica de San Pedro.
Durante todo este año todas las diócesis están invitadas a organizar peregrinaciones, itinerarios o momentos de oración individual o comunitaria con la participación de obispos y fieles. El propósito es redescubrir la importancia central de la oración en la vida personal, en la Iglesia y en el mundo.
Así Fisichella detalló que en preparación para el Año Santo 2025, se impulsarán diversas iniciativas, como “peregrinaciones de oración” y escuelas de oración dirigidas por los obispos. Por esta razón, el papa liderará una escuela de oración en su papel como obispo de Roma.
