Poeta, creadora de contenido (@maledimiele con 754.000 seguidores) y comunicadora, la viguesa Marta Soliño acudió al set de Atlántico TV para presentar su tercer poemario, “Siempre que estoy a punto de conocerme”, una selección de versos intimistas.
Dice de su tercer libro que es especial. ¿Qué lo diferencia?
Está ilustrado con imágenes, algunas en colaboración con la fotógrafa viguesa Paula Vázquez, otras son de familiares o incluso mías. Es un libro más visual que el resto.
Tardó en publicar por su timidez a compartir sus versos. ¿Ya está superado?
Creo que esa timidez o pudor nunca hay que perderlo del todo. Hace que tenga más esencia lo que se escribe, que sea más personal. Ahora no tiene nada ver con lo que sentí con el primero, era un vértigo enorme ante la posibilidad de que más gente pudiera leerlo.
Logró la popularidad con las redes sociales. ¿Se vuelve más clásica en el formato tradicional?
Siempre digo que el contenido en redes está adaptado al formato. Son escritos cortos, fáciles de leer y compartir. En los libros, uso un estilo más adecuado a la literatura de serie, más largo.
¿Por qué escogió este género frente a otros?
No tengo una respuesta muy concreta. Cuando descubrí la poesía, me cautivó. Empecé a interesarme por ella y después a escribirla, pero no descarto la prosa.
¿Es más de versos pautados o estructuras libres?
Hago verso libre, pero me gusta leer poemas estructurados, más clásicos. Aún no me atrevo a componer con pautas. Hacer poesía es estudiar constantemente para mejorar.
¿Qué papel juega la poesía en la sociedad actual?
Es complicado. Es una forma de ver la vida, está presente en las pequeñas cosas, en el día a día. Da una visión diferente, más bella, nos hace reflexionar. Da una visión más poética.
¿Cómo incorpora los versos a su cotidianidad?
Aparte de la creación de contenido para redes, mi cotidianidad es la escritura. Intento a leer todos los días y aprender a escribir mejor. Ahora tengo la presión de tener que sentarme a hacerlo, no como antes que escribía cuanto me lo pedía el cuerpo. Todos los días me pongo a escribir un poco.
Es un lujo poder vivir de la poesía.
Sin la combinación de las redes sociales, yo no podría vivir de la poesía. Sería imposible si no tuviese detrás una comunidad tan grande las en redes y la colaboración con marcas que me gustas. No podría porque es un mundo bastante precario.
¿Cómo suenan sus composiciones?
Mi poesía nunca estuvo pensada para recitar en alto, no lo está. La mayoría de mis poemas no sé cómo suenan. Ahora me fijo más en el ritmo de los versos y procuro leer alguno en sitios grandes o en mis presentaciones.
¿Hay algún lugar especial para inspirarse?
Escribo mayoritariamente en mi casa. Suelo ponerme en mi escritorio y enciendo una vela con la luz del atardecer, cuando apenas hay luz natural. Otras veces lo hago de camino en el autobús o en tren, donde surge la inspiración.
