La parroquia de Fornelos, en O Rosal, vivió ayer una de las celebraciones más singulares del Carnaval de toda Galicia.
La "Corrida do Galo" reúne todos los años a cientos de seguidores de esta tradición que se conserva en la comarca del Baixo Miño. Se trata de una competición en la que los participantes, denominados "jinetes'" montados en burro, deben intentar romper, ayudados de palos de madera, una olla de barro que contiene al gallo, representado ahora con una figura de papel. Este acto reúne a cientos de personas, que siguen disfrazados los avatares de tan singular carrera.
No se acaba aquí en Entroido ancestral de Fornelos. Una vez finalizada la celebración tradicional, la fiesta continuó en la parroquia. Por la noche las orquestas América y Son d´Vigo pusieron la nota musical a la verbena a partir de las 22.30 horas. El fin de fiesta estuvo a cargo de Rober Hyde.
Para hoy martes de Carnaval está previsto que por la tarde por la tarde se celebra la tradicional "frixidela", fiesta popular que reúne a numerosos participantes y en la que se preparan en el mismo "torreiro" -en la plaza central de Fornelos- tortillas de huevo casero con chorizo. Una forma rica y contundente para finalizar las fiestas. n