Los cambios en el sistema de reparto movilizan a los carteros

Los cambios planteados por Correos en el modelo de reparto bautizado como “modelo de distribución de última milla” movilizó a la treintena de carteros que se encargan de la entrega postal desde la sede comarcal situada en el límite de los municipios de Baiona y Nigrán. Aseguran que los cambios organizativos que presuntamente se implantarían desde hoy miércoles 29 de diciembre restará estabilidad en el servicio al eliminar zonas que serán absorbidas por otras más amplias y abogan por que se mantenga el sistema “un barrio-un cartero” en especial en lugares como Baiona, Gondomar, Nigrán o Oia en donde existe un gran volumen de zonas rurales. Advierten además de un empeoramiento en la calidad del trabajo y una pérdida de efectivos a medio plazo.

En este sentido las versiones se contradicen, mientras los carteros aseguran de su entrada en vigor, de su improvisación y que se decidieron sin la negociación previa con el personal, desde la compañía pública inciden en su paralización cautelar y que por ahora se mantendrá el concepto cartero/sección. Aclararon que en el plazo de dos meses se creará una Comisión de Estudio paritaria para encontrar el método más adecuado en las necesidades de futuro de Correos y que no afectarán a los puestos. Según indicaron fuentes de la entidad a este diario, “los trabajos del Plan Estratégico deberán de estar concluidos antes de junio de 2022”. Unas decisiones que además fueron adoptadas en la Mesa de Diálogo celebrada ayer mismo y consideran que la manifestación”no está justificada".

Desde la empresa estatal insisten en que los cambios son necesarios ante una caída de la actividad postal y del auge del negocio de la paquetería y que “garantizarán la calidad del servicio y la estabilidad del empleo”. “El objetivo del nuevo modelo de distribución será la adaptación y modernización rápida de la red de reparto para asegurar la prestación del servicio público postal con calidad y, además, reforzar a Correos”, rematan.

La Confederación General del Trabajo de Galicia, el sindicato CGT, considera la iniciativa que Correos manifiesta estar paralizada de “improvisación y chapuza” y que debe llevar asociada un estudio de riesgos laborales al llevar aparejada cambios en las cargas de trabajo. Lamentan que se planteasen inicialmente “en el peor momento del año y donde existe una presión considerable sobre el personal debido al reparto de la paquetería de Navidad”.