Els Joglars, dosis de humor ante la corrección política

La compañía reivindica la libertad de expresión con su última obra, “¡Que salga Aristófanes!”

Agencias

Publicado: 09 oct 2022 - 00:16 Actualizado: 09 oct 2022 - 12:15

Dolors Tuneu, a la izquierda, junto al resto de integrantes de Els Joglars.
Dolors Tuneu, a la izquierda, junto al resto de integrantes de Els Joglars.

La compañía de teatro Els Joglars reivindicó ayer, coincidiendo con la apertura del 27 Festival Internacional de Teatro de Humor que protagoniza esta compañía en Santa Fe (Granada), la importancia de defender la comedia en los tiempos actuales: “Un canto a la libertad artística frente a lo políticamente correcto”.

En una entrevista, la actriz e integrante de la compañía Dolors Tuneu explicó que la obra que presentan esta noche supone una vuelta a los orígenes de la comedia y, al igual que otras de su amplia trayectoria, una defensa de la libertad de expresión. “ ‘Que salga Aristófanes’ pretende ser un canto a la libertad artística en un momento en el que hay problemas con lo que llamamos lo políticamente correcto”, aseguró Tuneu, quien cree que ese contexto se ve además actualmente alimentado por las redes sociales.

La artista considera que “no son buenos tiempos para la comedia”, que necesita precisamente de una libertad absoluta para, en determinadas ocasiones, poder ser “cruel, bárbara, salvaje o despiadada” desde el escenario. “En nuestro caso, el humor, que es el que nos alimenta, nos da ese giro tan necesario para hacer la vida más llevadera, como un antídoto contra todos esos fanatismos que acotan el espacio que debe tener el arte, que no debe ser correcto y sí mover ciertos cimientos. Decir cosas verdaderas, pero amargas, sobre aquello que pasa”, explicó. La integrante de Els Joglars insistió en que el humor hace la vida mucho más fácil: “Sirve para hacer llevadero lo insoportable. Justo en estos tiempos es más necesario que nunca”, ha recalcado.

En un mundo en el que las redes sociales parecen ofrecer tantas posibilidades para opinar, considera que la sociedad cada vez más empieza a repetir al mismo tiempo esa frase de que “no se puede decir nada”, porque todo se juzga con los ojos de una moral de un determinado momento. “Creo que una parte de la sociedad, lo hemos visto con esta obra, tenía muchas ganas de que alguien hablara desde este otro lado”, indicó. Por todo ello, vuelven a reivindicar la controversia, el debate y el pensar distinto: “Esto alimenta nuestra libertad de expresión y nuestra democracia. Hoy en día hasta el matiz se ha vuelto incómodo y tienes que empezar una frase justificándote”.

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