Opinión

No es esto, no es esto

Acudimos a las hemerotecas y resucitamos por su rabiosa actualidad el famoso discurso de Ortega y Gasset el 6 de Diciembre de 1931 en el Cinema Opera de Madrid, nos ofrece paralelismos y contenidos  que podemos trasladar a la actual crisis política nacional.
Solamente unas pinceladas del ilustre pensador español. Decía el filósofo que era necesario rectificar el perfil y el tono de la República. Les pedía a los republicanos que no la falsificaran: la República es una cosa y el radicalismo es otra. Si no al tiempo.
Estaba el filósofo preocupado al ver a la República minada por el espíritu de facción, el exacerbado regionalismo, un anticlericalismo que presagiaba un futuro atroz  y contemplar a los reaccionarios amenazando con el régimen que acababa de nacer.
En una intervención suya en un debate sobre el proyecto de la Comisión de la Constitución como portavoz de su grupo parlamentario rescatamos lo siguiente: “Esa tan certera Constitución ha sido mechada con unos cartuchos detonantes, introducidos arbitrariamente por el espíritu de propaganda o por la incontinencia del utopismo”.
Se refería a esas dos o tres  regiones ariscas que darán lugar a dos o tres regiones semi-Estados frente a España , que con sus características históricas, culturales y económicas les animará a una campaña de nacionalismo allí donde ahora no ha existido.
Otro cartucho detonante era la legislación en la Constitución sobre la iglesia, “de gran improcedencia”. Acusó a las Cortes constituyentes de sectarismo y radicalismo huero, motejando a los extremistas radical-socialistas más exaltados de “ jabalíes”.
A los pocos meses del advenimiento de la República ya entró en España la tristeza,el descontento y  una sociedad de brazos caídos ante la situación revolucionaria ,era la antesala y se presagiaba la próxima guerra fraticida.
Ortega y otros, amenazados por los revolucionarios, abandonan España como republicanos y regresan en plenos gobiernos franquistas que les cobijan hasta el final de sus días .
Frase hecha: “ los pueblos que olvidan su historia están condenados a repetirla”, y lo que está ocurriendo en España desde las elecciones del pasado diciembre hasta las recientes penas de telediario a siempre el mismo partido político ,incluidos los paseíllos de los radicales por las televisiones, estratégicamente orientados a crea opinión y cambiar un modelo de sociedad, debe preocuparnos a los españoles y ya no vale crear fundaciones o grupos de opinión minoritarios contra la marabunta radical que asola  España y cuya meta es destruir la democracia, utilizándola de momento ,para llegar al mando único, su meta, aquí, a la vera de Europa.
Asusta ver como los grandes medios de comunicación dan mayor cobertura a los advenedizos radicales al entrar en su tienda de campaña del hemiciclo y se olvidan de los valores nacionales, un país que tiene miedo a lucir su bandera, su lengua ,sus costumbres, debido al temor de este radicalismo-separatismo ausente en Europa, nos diagnostica que España está gravemente enferma y sin antídoto de momento.
Existen dos componentes claves : los socialistas siempre participan  en todas las quinielas desestabilizadoras y la derecha con su eterno complejo. Unos no recuperan ante el  desgaste de poder del otro como venía ocurriendo y  eso no produce un vuelco electoral a la europea sino un parto múltiple de  difícil gestión. Motivos :  la corrupción,el nepotismo, los nuevos ricos de la política y el control total del bipartidismo, han hastiado a la sociedad española, aderezado esto con la crisis española y  mundial, el cocktail perfecto.
Reacción de un tipo de votantes anestesiados, en lugar de provocar un cambio electoral y votar  a partidos emergentes y españolistas, caso de UPyD, Ciudadanos o Vox, que pueden cubrir el arco izquierda-derecha, se le ocurre votar a predicadores revolucionarios que compraron  o le vendieron el discurso  las dictaduras de Venezuela e Irán.
Seguramente esos dos países entre otros lo están celebrando al meter el bicho marxista en el parlamento español y mandar avisos a Europa, el resto de los españoles  asisten  impávidos ante la escalada revolucionaria y deben prepararse para hacerles frente con las armas que nos ofrece la democracia.
En mayo del 31 comenzaron la quema de conventos, prendieron la mecha de la guerra civil y ahora  ya en el poder  los separatistas y marxistas en ciudades o autonomías importantes bajo el paraguas democrático, apoyado y  propiciado por el partido socialista  obligan a alertar   a España de una incertidumbre política que de  reeditarse un gobierno del Frente Popular puede resquebrajarse el periodo más largo de nuestra de nuestra convivencia democrática.
Los dirigentes actuales del partido socialista jamás tendrán un segunda oportunidad de haber causado un primera buena impresión al excluirse de la socialdemocracia  europea y acudir a su gen marxista por el mero hecho de eliminar a la derecha, esto no se puede vender en la Europa de hoy,  conseguir el poder, solo interesan los fines nunca los medios.
Conocen estos incautos que juegan a políticos de kindergarten, cuánto dinero necesita España en millones de euros cada día para atender las necesidades básicas: educación y sanidad, por ejemplo, son los mercados los que nos mantienen en pie , los ahorradores, europeos y americanos, a través de sus gestoras invierten sus fondos o no, comprando deuda soberana en función de las garantías que ofrece el país, sus economistas de cámara deben conocer que España iguala su deuda a su producción, un billón de euros, tienen soluciones, no, los gestores de fondos si, escapan o aplican un interés de usura.
La respuesta de los mercados ante una inestabilidad en ciernes en España puede hacer añicos este falso estado de bienestar ya deteriorado y en caída libre, mientras tanto los españoles aturrullados ante las televisiones en sus prime time con docenas de tertulianos reenviando mensajes de sus estados mayores y creando opinión a través de la confusión.
Los socialistas en esta etapa democrática siempre han accedido al poder a través de la urnas pero con un electorado español convulso, emocionalmente inestable como para votar en condiciones normales: el tejerazo, el  11-M y ahora pretenden coger el timón de España con el peor resultado electoral de sus historia, el cuarto por Madrid y quieren que el ganador de las elecciones se abstenga para proponer un gobierno de progreso y cambio, será al revés llevar a España a las mazmorras  aprovechando que la derecha disfruta del  año de la marmota.
No es esto, lo que demandan los españoles, que tienen como mascarón  de proa  la Constitución y la Monarquía  Parlamentaria   ,   los socialistas  deben copiar de  la socialdemocracia europea  y olvidar el rencor y el odio de su guerra civilismo, utilizado en campañas electorales, para  situarse en  una civilizada centro izquierda  a  la europea.
 

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