El mundo está al revés y mientras el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, se preocupa por el gasto excesivo de las familias, la ministra de Economía Nadia Calviño, se preocupa por el ahorro, Y tenía que ser justo lo contrario, que el gobernador diera prioridad a promover medidas para el ahorro , mientras que a la ministra le debiera preocupar que se produjera mucho gasto, porque así las cosas van mejor, se genera empleo, las empresas crecen e invierten más para seguir creciendo pero reconoce que nos e puede ahorrar cuando no se llega a final de mes. Pero la costumbre del gobernador del Banco de España es siempre solicitar mayor flexibilidad en el empleo, quejarse de la ampliación del salario mínimo y darse por satisfecho con todo lo que pasa alrededor de los bancos justo cuando se acaba de conocer que el rescate bancario ha supuesto 53.000 millones de euros de pérdidas a todos los españoles. ¡Ay si los gobernadores hubieran estado más diligentes con sus competencias!
