En el Tribunal Constitucional se ha roto la unanimidad a la hora de decidir sobre los asuntos relacionados con la independencia de Cataluña, al rechazar el recurso presentado por el exvicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras, sobre su prisión preventiva. La decisión ha sido adoptada por nueve votos a favor y tres en contra de magistrados progresistas. Eso quiere que un magistrado progresista y otra magistrada inicialmente adscrita a ese sector, han votado con la mayoría conservadora. Uno de ellos ha sido el ex fiscal general del Estado con Rodríguez Zapatero, Cándido Conde Pumpido, al ue sectores conservadores señalaban como el posible causante de la ruptura de la unanimidad por su ponencia sobre la sentencia que dictó Manuel Marchena por el caso del asedio al Parlament de Cataluña, cuyo debate sigue pospuesto. Sin embargo, apenas ha tenido eco esa decisión quizá ocultada de forma interesada, a pesar de que con esa decisión transversal se pueden complicar las expectativas de los defensores de Oriol Junqueras cuando vayan a Estrasburgo.
