Opinión

Efecto mariposa en puerto/aeropuerto

El Puerto tenía listo para la firma un acuerdo de colaboración con Lisboa en materia de promoción del tráfico de cruceros pero se cruzó por el medio una polémica aeroportuaria que implicó a los alcaldes de Vigo y Oporto a cuenta del vuelo de la TAP desde Peinador a la capital portuguesa. Un enlace aéreo visto en Oporto casi como una agresión y un intento de llevarse pasajeros gallegos a Lisboa sin pasar por el aeropuerto Sá Carneiro. Lo que vino después, con las declaraciones poco afortunadas del alcalde de Oporto -y además, mal traducidas- y la contestación desde el consistorio de la Muy Leal provocó un auténtico efecto mariposa y que en Lisboa se tentaran la ropa. Parece que su Autoridad Portuaria consideró que firmar el acuerdo de colaboración con Vigo en turismo marítimo supondría abrir un frente portuario con Oporto a propósito de la Muy Leal sin haberse cerrado todavía la herida aeroportuario. 
Como es conocido, la ciudad del Duero ha puesto en marcha una terminal de cruceros que ya ha superado a la viguesa en número de escalas, aunque todavía no en desembarcos. Lo que quizá no sea tan conocido es que Oporto, a través del Puerto de Leixoes, firmó un pacto con la Autoridad portuaria coruñesa en cuestión de turismo marítimo que ha funcionado como una “pinza” con Vigo, como se puede constatar con la estadística de los dos últimos ejercicios: A Coruña se ha convertido en la primera ciudad del Norte peninsular en número de pasajeros, desbancando al puerto vigués, en tanto que Oporto logró en 2017 su mejor cifra histórica en llegada de viajeros por mar. Mientras que en ese mismo año la Autoridad Portuaria de Vigo anotaba el peor ejercicio del siglo, cada vez más lejos de sus cifras de hace diez años, cuando alcanzó el quinto puesto en el escalafón nacional peninsular. Ahí llegó el convenio con Lisboa. De momento frustrado. Continuará...

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