Opinión

Provocador e incoherente deseo

Nos restregaremos los ojos para comprobar si vivimos en este mundo o en otra galaxia. Pretenden construir una mezquita nada menos que en la plaza de toros de Barcelona. Ya han sido varios los templos en su día convertidos en mezquitas siendo clamorosa la conversión del de Santa Sofía. Para suspicaces sería conveniente recordar que la mezquita de Córdoba, primitivamente, fue un templo cristiano. Hablaremos de ello otro día a raíz de una documentada defensa del Cabildo cordobés.
Las plazas de toros son de los símbolos españoles más esenciales. Los toros de lidia, las reses bravas son una especie única. Tengo unos buenos amigos ganaderos que me han invitado a su ganadería alentejana y enseñado y explicado los pasos de los astados desde que nacen hasta llegar al coso. Todo un arte.
Por mucho que se hayan eliminado las corridas de toros en la Comunidad catalana, siguen ahí esos monumentos que perpetúan la historia del arte de Manolete y Curro Romero. Darle ese vuelco es un ataque a la historia, la cultura y la etnografía. Esperemos que, serenadas las aguas, aquellos recintos vuelvan a ser usados para lo que fueron construidos.
Pero el tema que subyace es la provocación y un proselitismo siempre inaceptable. Porque a nadie se le ocultan las intenciones del Islam de reconquistar lo que perdieron durante ocho siglos en un deseo latente que incluso manifiestan dando la impresión de una silenciosa invasión. Poco a poco se introducen usos e incluso atuendos que en nada tienen que ver con los de este país. Y, este país, con muestras de comprensión y democracia permite todo ello que veremos a donde llega...
Se les permite elevar mezquitas, profesar su fe y transmitir sus costumbres con toda naturalidad, lo cual honra a los españoles y a su permisividad desde una positiva cultura laica. Saber convivir con ideas distintas da categoría a quien lo practica. El laicismo y los laicistas nada tienen que ver con la laicidad y lo laico. Conceptos ambos que muchos confunden lamentablemente.
Pese a ello sabemos la que están pasando los de esta nuestra cultura en los países islámicos. Aqui se les permite practicar libremente su fe.¿Existe reciprocidad? ¿Permiten elevar templos o practicar una fe distinta a la suya?. ¿ Donde quedan los Derechos Humanos y la democracia en países totalmente confesionales?
Por eso lo de la conversión de una plaza de toros en España en una mezquita cuando menos es chocante. Muchas veces nos pasamos en una candorosa inocencia utilizada por otros de una manera cuya rectitud está por probar.
Decía Castelao que: O verdadeiro heroismo está en transformar os desexos en realidades e as ideas en feitos". Confiemos en que esos deseos nunca lleguen a crear héroes  refrendados por los hechos y realidades fuera de lugar.
Una noticia sin comentarios, copiada de un diario de tirada nacional y que dejo para la reflexión: "Si no hay Iglesias en Arabia Saudita,  no habrá mezquitas en Noruega. El Gobierno noruego acaba de prohibir a Arabia Saudita financiar mezquitas mientras no permitan la construcción de iglesias en su país. Para defender la libertad en Europa frente al totalitarismo islámico. Jonas Gahr Stor, ministro de Exteriores, decretó que no serían aceptados donativos de Arabia Saudita así como de empresarios musulmanes para financiar la construcción de mezquitas en Noruega". Dice el ministro: "Sería paradójico y anti natura aceptar esas fuentes de financiamiento de un país en el que no existe libertad religiosa, un contrasentido". Y anunció "Noruega llevará este asunto al Consejo de Europa, defendiendo la más estricta reciprocidad con Arabia Saudita". Hay momentos en los que es necesaria la coherencia y firme decisión.

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