Opinión

Centenarios

Todos los años se celebra algún acontecimiento que cumple los 100 años. Por ejemplo la ‘Revolución Rusa’ de 1917 que acabó con la era bolchevique e introdujo el nacimiento mundial del comunismo aunque la caída de la Unión Soviética ha cambiado un poco el panorama. Pasemos a otros acontecimientos del mismo año. Entró la USA con la 7ª de Caballería en la I Guerra Mundial y gracias a su poderío militar acabó con la carnicería en Europa de dicha guerra. La última tragedia que deseo mencionar, aunque hubo cientos de miles al principio del siglo XX fue el hundimiento del Titanic en 1912. Pero pasemos a otros que son más nostálgicos como el sector de la música. El gran compositor Enrique Granados, hoy olvidado por un gran sector de los usuarios de WhatsApp, que falleció trágicamente junto a su esposa en 1916 en viaje a Nueva York a bordo del buque ‘Lusitania’ torpedeado por un submarino alemán. Y finalmente, para los amantes de la música ligera la fecha de nacimiento del mítico actor y cantante Frank Sinatra, el 12 de diciembre de 1915. 
Pero esta vez cambiaremos de tema de personajes fallecidos y recordemos al festejar el cumpleaños de un personaje famoso que acaba de cumplir los 100 años y que aún sigue lúcido como siempre. Me refiero al mítico actor Kirk Douglas, nacido el 9 de diciembre de 1916. Poder resumir la increíble biografía de un ser humano bueno y honesto, en unas pocas líneas es casi imposible sin embargo desde muy joven emprendió el camino de las tablas y luego el cine y se convirtió en uno de los actores más famosos y longevos de la historia del celuloide. 
Llego a Nuevo York, con su padre y sus seis hermanas desde Bielorrusia después de la I Guerra Mundial. Su padre apenas podía ganar para la familia y el joven Kirk tuvo que combinar sus estudios con un trabajo vendiendo refrescos, dulces y periódicos. Sin embargo, acabado su graduación de la universidad pronto entró en el mundo del teatro. En 1941 debutó en Broadway pero al poco tiempo estallo la II Guerra Mundial y Kirk se enlistó en la Marina como oficial de telecomunicaciones. Pero dejemos a un lado su comienzo y concentremos en lo más importante, su extraordinaria carrera cinematográfica, al ser descubierto por la Paramount destacando algunos de sus actuaciones más importantes. 
Aunque fue nombrado por el Oscar en 3 ocasiones - 1949, ‘El ídolo de Barro,’ 1952, ‘Cautivos por el Mal’ y 1957, ‘El loco del Pelo Rojo - nunca lo ganó pero fue protagonista en 2 películas épicas de máximo taquillaje. En 1957 junto con Tony Curtis actuaron en ‘Los Vikingos’ con espectaculares escenas de combate en donde Kirk pierde un ojo y Tony una mano. Luego le siguió, entre muchas otras en 1960 ‘Espartaco’ con Jean Simmons. 
La historia supuestamente verídica del esclavo en la época romana que se rebela contra el imperio y los martirios de los gladiadores. La escena de un combate a muerte con un superhombre negro le gana por goleada a la película posterior ‘Gladiador’ con Russel Crowe del año 2000. Hizo muchas películas de vaqueros que era la costumbre de todo actor de Hollywood. No quedo uno sin portar pistolas, montar a caballo con la 7ª y salir a matar a indios de todo tipo. En mi humilde opinión, la película que más me dejó en la memoria de este magnífico actor era ‘Senderos de Gloria’ de 1957. La historia basada en hechos reales de la injusticia del ejército francés durante la I Guerra Mundial. Tres soldados elegidos ‘a dedo’ son condenados a muerte como ejemplo de cobardía. ¡Película increíble!

Te puede interesar