"Atenas no me condiciona el equipo para el Villamarín"

Hace medio mes, el Celta visitaba al Eibar antes del decisivo partido de Liga Europa ante el Standard de Lieja y Eduardo Berizzo, técnico celeste, reconocía que el choque continental influiría en el liguero, en el que dejó en el banquillo a futbolistas como Cabral, Sisto, Pablo Hernández, Jonny o Marcelo Díaz, para dar la titularidad a Señé, Planas, Rossio Mallo como mediocentro. Sin embargo, ayer afirmó que en la visita de este mediodía al Betis no influirá para nada el choque del próximo jueves en Atenas ante el Panathinaikos. La diferencia está en que el encuentro en Eibar venía tras parón de selecciones y éste no.

Así, Berizzo fue rotundo ayer al contestar sobre esta cuestión que "no me condiciona. Vamos a intentar ganar este partido con todo y después hay un espacio prudencial al del jueves, que es muy importante porque nos mete en la siguiente fase o nos elimina. Pero el del Betis también es importante. Vamos salir a jugarlo con mucha intensidad y creemos que después del Betis, incluso los escogidos pueden repetir el jueves".

Una vez solventada la duda europea, quedaba por saber si el técnico siente que la menor producción en puntos de los partidos de esta temporada lejos de Vigo respecto a los de la pasada es norma y a qué se debe. "No es una tendencia. Intentamos jugar bien y jugar en casa igual que fuera. Que los resultados no hayan llegado forman parte del mismo juego pero nuestro planteamiento no cambia", analizó.

Berizzo prefiere centrarse en el Betis porque "se acerca el parón navideño y terminar enganchado arriba es un estímulo. Es una posición de confort que te permite desatender la presión de pelear por la permanencia y seguir apoyándote en eso para saltar. Estamos acomodados en la tabla como deseamos y mejorar esa posición es nuestro objetivo".

Para lograrlo, su equipo tendrá que superar a "un rival que ha modificado su manera de jugar con la llegada de un nuevo entrenador (Víctor Sánchez del Amo). Antes jugaba un 4-4-2; ahora, un 5-3-2. Ha elegido a Joaquín como segundo delantero, compañero de Rubén Castro; ha modificado su defensa; usa carrileros largos con profundidad y centrales muy fuertes… La llegada del entrenador no sólo modifica la energía, sino que este técnico también ha elegido un sistema que el equipo siente como cómodo". Berizzo, alabado el viernes por su homólogo bético, devolvió los halagos: "Es un entrenador muy analítico, muy pendiente de su rival. Tiene conocimiento sobre nosotros y será un partido difícil". Y restó trascendencia, a nivel del conocimiento que pueda tener Víctor Sánchez sobre el conjunto vigués, a la presencia en el club sevillano como director deportivo del ex céltico Miguel Torrecilla porque "toda la información está al alcance de todo el mundo. La interpretación o el interés de adquirirla y utilizarla es la diferencia".

En cuanto al dibujo propio, el entrenador céltico admitió que, con los dos delanteros bético, "la idea de defendernos con uno más. Y eso va a comprometer a nuestros laterales y a nuestros mediocentros. Pero no saldremos con defensa de tres". En esta retaguardia reconoció que "la ausencia de Planas, acentuada por la de Hugo, obliga a la repetición de Jonny y Facundo. Pero son gente muy fuerte, incluso Lemos. Y Costas jugando ahí, que es una opción que me gusta mucho, porque es muy rápido, muy fuerte y te garantiza un gran juego aéreo".n