Del Toro revitaliza al "detective ocultista" en su nueva trilogía, "Blackwood"

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La fecha del 8 de diciembre es de las más luctuosas de la historia del rock, básica y fundamentalmente por ser la fecha en la que un enfermo mental asesinó a tiros a John Lennon, de cuya desaparición se cumple este próximo 8 de diciembre el 40 aniversario. Acerca de este suceso, probablemente todo lo que se ha podido conocer ha sido ya relatado, explicado y teorizado en diferentes películas, libros y documentales, de manera que no volveré sobre este tema, del que por otra parte cada vez que llega esta fecha se repiten artículos reciclados de un año a otro, tópicos manoseados hasta lo indecible y lugares comunes de todo tipo.

Sí me detendré en cambio en el otro trágico suceso que tuvo lugar un 8 de diciembre en la historia del rock, en esta ocasión del año 2004, el sangriento asesinato del que fuera guitarrista de Pantera y Damageplan, Dimebag Darrell, a los 38 años a manos de otro perturbado, otro fanático enloquecido que vació el cargador de su arma de fuego sobre el músico antes de ser abatido por los disparos de los agentes de policía.

Si grupos como Judas Priest, Iron Maiden o Metallica se convirtieron en los iconos del heavy metal en la década de los 80, y su estilo marcó la tendencia dominante en aquellos años, una de las bandas que más influyó en el cambio y en la evolución del género en los años 90 fueron los estadounidenses Pantera, la banda creada en 1981 por el guitarrista Darrell Abbott con su hermano el batería Vinnie Paul. A pesar de que a lo largo de los años 80 Pantera fueron un grupo totalmente underground e incluso su estilo musical se movía en unos parámetros totalmente distintos de los que les convertirían en estrellas absolutas del heavy metal.

Gracias a la entrada en el grupo del cantante Phil Anselmo y siendo conscientes de que el estilo de hard rock que practicaban a partir de 1989-90 iba a perder el gancho y la popularidad de la que había gozado, endurecieron su estilo y se reinventaron por completo, convirtiéndose en una banda que revolucionó por completo el heavy metal en todo el mundo, sentando las bases de lo que se empezó a llamar por aquel entonces “Groove Metal” y consiguiendo millones de enfervorizados fans en todo el planeta. Al tiempo, Dimebag Darrell, pieza clave en esa reinvención del sonido del grupo se convirtió en un respetado y reputadísimo guitarrista del que siempre se elogió su originalidad, su técnica y su potencia dentro del nuevo sonido de Pantera.

Sin embargo, a finales de los años 90, las relaciones personales entre Phil Anselmo y el resto del grupo, parece ser que especialmente con Darrell, empezaron a deteriorarse progresivamente hasta llegar a un punto en el que la ruptura se hizo inevitable, ruptura que se anunció finalmente en 2003, después de que ambas partes, que ya habían puesto en marcha proyectos musicales paralelos, se atacasen mutuamente en una guerra mediática en la prensa musical que incluso dividió radicalmente a sus fans.

Toda esa desagradable situación incluso pareció aumentar cuando los hermanos Abbott dieron a conocer su nuevo grupo, Damageplan. En febrero de 2004, el nuevo cuarteto, que también incluía al vocalista Patrick Lachman y al bajista Bob Zilla, editaron un prometedor álbum debut, ‘New Found Power’, y emprendieron una larga gira por todo el país, el ‘Devastation Across the Nation Tour’. Desde finales de octubre, el cuarteto recorrió de nuevo Estados Unidos en el segundo tramo de la gira antes de llegar, 32 shows después, al Club Alrosa Villa en Columbus, Ohio, donde harían un show el 8 de diciembre de 2004. Nadie podía imaginar que un paranoico asesino les estaba esperando allí con intención de matarles.

A los pocos minutos de que Damageplan hubieran empezado su actuación, según los informes policiales que se publicaron con posterioridad, un ex marine estadounidense mentalmente trastornado llamado Nathan Gale, fuertemente armado irrumpió en el escenario y disparó despiadadamente al guitarrista a quemarropa. Algunos testigos dijeron que gritó: "¡¡Rompiste Pantera, mal nacido!!", mientras que otros dijeron que no podían entender lo que decía, y para entonces había comenzado el tiroteo.

En la confusión que siguió, Gale también disparó y mató al jefe de seguridad de Damageplan, Jeffery Thompson y al miembro del personal del Alrosa Village, Erin Halk, quienes intentaron reducir a Gale dando con ello tiempo suficiente para que los otros músicos e innumerables asistentes escaparan. También murió Nathan Bray, un fan que heroicamente intentó proteger con su propio cuerpo a Dimebag Darrell. Los disparos de Gale hirieron al gerente de la gira de Damageplan, Chris Paluska, y al técnico de batería John Brooks, antes de que del oficial de policía James Niggemeyer abatiese de un solo disparo de escopeta al asesino, que aún mantenía como rehén a otra persona. En esos mismos informes policiales, se dijo que Nathan Gale intentó matar a Darrell cuando éste salía del autobús de gira del grupo horas antes de la actuación, pero que desistió al encontrarse demasiada gente alrededor del vehículo.

Quienes conocían a Nathan Gale, decían de él que era alguien de carácter muy depresivo e inestable, con extraños cambios de estado de ánimo, pero no propenso a la violencia. Se enroló en la Infantería de Marina en 2002 pero dejó el cuerpo, por razones aún desconocidas, dieciocho meses después. Trabajó como obrero de la construcción y en un taller mecánico al tiempo que jugaba en los Lima Thunder, un equipo de fútbol americano semiprofesional local. En el autobús del equipo, sus compañeros aseguraban que a menudo se podía encontrar a Gale con los auriculares puestos, escuchando a Pantera.

El 17 de noviembre de 2004, a las 3:20 a.m., la policía arrestó a Gale por conducir con una licencia suspendida, pero ello no conllevo su arresto, sino una fuerte multa económica. Para entonces, declararon algunos conocidos suyos, Gale había cambiado; había comenzado a comportarse de manera muy extraña, imaginando conspiraciones disparatadas y llegando a decirle a uno de sus amigos que Pantera le había robado sus canciones y que los iba a demandar. La creciente paranoia que se desarrolló en su cerebro y la incomprensible facilidad con la que es posible adquirir unarma de fuego en Estados Unidos hicieron el resto. Eligiendo, a modo de “copycat”, la fecha del 8 de diciembre, la misma fecha del asesinato de John Lennon.

Una aterradora escena que apenas duró 6 minutos dejó al mundo sin uno de los guitarristas más talentosos del heavy metal, a sus compañeros de banda traumatizados y a sus familiares y fans sumidos en una atónita incredulidad. Una tragedia que por desgracia se seguirá repitiendo mientras la sociedad estadounidense, por encima de la presión de lobbys como el de la Asociación Nacional del Rifle, no se cuestione seriamente la necesidad de restringir a los mismos niveles que existen en Europa la posesión y el uso de armas de fuego.

Publicado: 06 dic 2020 - 02:32 Actualizado: 07 dic 2020 - 02:06

El cineasta Guillermo del Toro.
El cineasta Guillermo del Toro.

El cineasta y escritor mexicano Guillermo del Toro inicia junto con el autor Chuck Hogan la nueva trilogía "Las cintas de Blackwood" con la novela "Los seres vacíos", en la que sigue "la tradición de detectives ocultistas". En una entrevista, Del Toro señala que "en la literatura fantástica hay un subgénero poco conocido, el del "detective ocultista", que siempre le ha cautivado desde un punto de vista personal, y cita como ejemplos a Carnacki, detective creado por William Hope Hodgson, que nació casi a la par que Sherlock Holmes y John Silence, creado por Algernon Blackwood.

Con esos antecedentes, Del Toro y Hogan decidieron crear un nuevo detective ocultista, y aunque primero pensaron en hacer "una nueva versión de John Silence", al ver que el personaje era tan distinto decidieron bautizarlo como Blackwood, en homenaje a su admirado autor. La novela viaja en el tiempo entre la actualidad, los años 60 o el siglo XVI, donde se sitúan los orígenes del eterno Blackwood. n

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