GALICIA

La Xunta prepara 4.000 camas para poder afrontar el "pico" de infecciones

Miembros de la Unidad Militar de Emergencias (UME) desinfectan zonas de urgencias del Hospital Universitario de Lucus Augusti
photo_camera Militares de la UME, en tareas de desinfección en las Urgencias del Lucus Augusti.
Núñez Feijóo confía en que el fin de semana lleguen el millón de mascarillas y los 134 respiradores comprados por su Ejecutivo

El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, actualizó en la tarde de ayer los datos proporcionados sobre los infectados por coronavirus en la Comunidad y que ascienden a 1.520 casos con lo que, por el momento, ponea a "Galicia en una situación ligeramente menos mala que la mayoría de las comunidades". El presidente gallego explicó que la curva de la pandemia "como era previsible" siga en aumento con 262 casos más ayer que en la jornada del lunes -un 20,8 por ciento más- por lo que pidió responsabilidad en el cumplimiento del confinamiento para evitar un aumento todavía más acusado.
Indicó  que de estos pacientes 67 se encuentran ingresados en las UCI's de los hospitales gallegos, 393 en otras unidades de hospitalización y 1.060 pacientes permanecen en sus domicilios. El incremento más significativo desde la jornada del lunes se produjo en los pacientes en UCI con un ascenso de 33 por ciento frente al incremento del 22% en ingresos hospitalarios.

Con todo, Núñez Feijóo incidió en que por el momento la situación de Galicia respecto a otras autonomías continúa siendo "menos mala". "Ojalá que con la anticipación que adoptamos en Galicia y el trabajo de los sanitarios y la responsabilidad de los gallegos sigamos en una situación un poco menos mala", proclamó Núñez Feijóo, que sostuvo, no obstante, que "no podemos descartar que en próximas semanas vayamos a una situación peor".

Llamada a la precaución

Pidió "precaución porque en las siguientes semanas podemos estar peor que otras" autonomías, por lo que "está prevista la utilización de quirófanos como unidades de reanimación o de cuidados intensivos". En paralelo, señaló que Galicia ya ha estudiado las medidas que habría que tomar ante un incremento de la presión hospitalaria en tanto que prevén que en el pico más alto de contagios Galicia podría necesitar de un total de 4.000 camas "exclusivamente" destinadas a tratar a los pacientes de la citada pandemia.
Actualmente, el total de camas en Galicia entre hospitales comarcales y de las ciudades son 6.200 por lo es probable que se precisen de "medios adicionales en algunas áreas de salud", admitió el presidente de la Xunta.
Con anterioridad, Núñez Feijóo había confirmado que espera que este fin de semana empiece a llegar el material sanitario comprado por el Servizo Galego de Saúde -Sergas- para hacer frente a la pandemia del coronavirus; al menos, "si nadie lo para", matizó. En una rueda de prensa telemática, el presidente gallego admitió que continúan existiendo "tensiones" por la falta de material, por lo que la Xunta prosigue en negociaciones para la adquisición del mismo después de haber pedido ya 8 millones de mascarillas y 134 ventiladores, tal y como desveló la pasada semana. "Esperamos que las primeras entregas se produzcan este fin de semana" a Galicia, si no se produce ningún problema en Aduanas, en tanto que el material llega desde China, por lo que debe pasar por "aeropuertos españoles" antes de llegar a Santiago de Compostela.
Recordó que el  número total de profesionales sanitarios afectados por el coronavirus en la Comunidad gallega asciende a 125 -incluidos médicos, trabajadores de enfermería y otro personal-, lo que supone el 9% de los casos activos. Además, de los 125 profesionales sanitarios infectados, aclaró que no todos sufrieron un contagio en el ejercicio de su práctica profesional, sino que algunos habían ido de viaje a Madrid o se vieron infectados por la visita de familiares procedentes de la capital española. 

El sector de las funerarias trabaja tranquilo y cumpliendo protocolos

"Máxima precaución" en el tratamiento de los cuerpos de personas que han fallecido a causa del coronavirus, pero también "tranquilidad" desde el "cumplimiento de los protocolos" que dictan las autoridades -con las que se está en contacto permanente- e incluso satisfacción por el "respeto" con el que los gallegos han acogido las directrices que limitan los aforos en los tanatorios y en los cortejos fúnebres para despedir a sus seres queridos.
Así viven las funerarias gallegas su día a día con un pueblo en el que, sobre todo en el rural, las despedidas masivas son habituales; y en el que han tenido que afrontar ya el tratamiento de varios cuerpos de personas que fallecieron tras sufrir el contagio del COVID-19. Lo explicó el presidente de la Federación Galega de Servizos Funerarios (Fegaserfu), José Becerra, cuya organización aglutina las asociaciones de las cuatro provincias, con la vista aún en el colapso que el sector fúnebre ha sufrido en la Comunidad de Madrid, una situación que ve difícil que pueda producirse en Galicia.
Y no solo porque no se puede establecer una comparación en el número de víctimas mortales -aunque "cada vida es una gran pérdida", en Galicia han fallecido hasta ayer 27 personas a causa del coronavirus y en Madrid más de un millar-, sino también por la propia dimensión del sector. "Espero que no, aquí somos muchas", trasladó Becerra.
Tanto Becerra como otros empresarios del sector consultados aseguran que en Galicia se trabaja con "tranquilidad" y "normalidad". n

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