Vigués, especialista en comunicación, Javier Cebreiros jugó ayer en casa, al abrir el congreso ‘Lenguando’ con su conferencia “Dime qué comunicas y te diré con quién andas”.
Finalizó su intervención, sorprendiendo al aforo que le escuchó en el Santa Irene, invitándoles a mandar un mensaje inesperado con un texto muy sencillo, ‘te quiero’, a alguien importante para cada uno. Y así explicó a Atlántico esta iniciativa.
¿Cuál es el objetivo del mensaje?
La finalidad es poner en práctica todo lo que tratamos en la charla. Cualquiera puede hacer sentir bien al que tiene a su lado, tan solo con decirle unas palabras bonitas.
En su ponencia relacionó la forma de comunicar con las compañías que se frecuentan. ¿Cómo puede influir el entorno?
Para ser un buen comunicador hay que trabajar en ser mejor persona. Somos lo que decimos, no lo que parecemos, y en ello, influye nuestro entorno. Hay que rodearse de personas positivas para pensar en positivo.
Pero no siempre se puede elegir con quién estar o sobre qué hablar. ¿Hay alguna forma de controlarlo?
Todos los días tomamos decisiones. Es importante porque supone una oportunidad para comunicar algo bueno a los que están con nosotros.
¿Qué importancia tienen las palabras que se escogen en cada momento?
Me gusta pensar que las palabras más importantes no son las que decimos, sino las que nos guardamos para nosotros mismos.
¿Es el lenguaje oral la mejor forma de comunicación?
Todo lo que hacemos comunica, desde la primera impresión que causamos a los demás. Lo importante es trabajar las emociones porque son lo que mejor se transmite, no las podemos ocultar y se contagian.
¿Considera que los nuevos modos de ocio y la falta de sociabilización entre la juventud contribuyen a empobrecer el sistema de comunicación?
Cualquier herramienta puede ser buena, dependiendo del uso que se haga de ella y esto incluye a las nuevas tecnologías. En el mensaje es donde radica la importancia de la comunicación y en iniciativas como enviar ‘te quiero’ a alguien importante.
