El vigués Rubén Fernández rozó el podio final en el Gran Premio de Letonia de motocross, que se disputó el pasado fin de semana y que supuso el retorno a la actividad del Mundial y de esta modalidad a nivel internacional. El piloto del equipo SDM Corse Yamaha protagonizó su mejor rendimiento personal en su cita mundialista al terminar en la cuarta plaza final, después de ser tercero en la primera de las dos carreras y séptimo en la segunda. En ambas, además, tuvo que sobreponerse a sendas caídas, especialmente dolorosa la segunda de ellas.
En la carrera inicial, Fernández se demostró a sí mismo que puede estar peleando con los mejores. De hecho, se impuso el líder del Mundial en esta categoría MX2, el francés Tom Vialle, con un tiempo de 35:20.720. Segundo fue el holandés Roan van de Moosdijk (35:27.599), para cerrar el podio el piloto vigués parando el reloj en una marca de 35:34.213.
Ese buen resultado propició que en la segunda carrera Fernández también pudiese competir con los mejores. Al final, la mentada caída lo alejó de los cinco primeros puestos pero acabó en un nada despreciable séptimo. En el global sumó 34 puntos, a sólo cuatro del podio, que cerró el francés Mathys Borrame. Por delante, los ya mentados Van de Moosdijk (40) y Vialle (47).
Una muestra más de lo cómodo que se encontró Rubén Fernández en Letonia es que se permitió el lujo de marcar la vuelta rápida de su categoría. Fue en el quinto giro de la segunda carrera cuando completó el circuito en un tiempo de 1.59:673.
Dos citas más esta semana
El Mundial prosigue esta semana con otras dos citas en Letonia. Mañana es el turno del Gran Premio de Riga, mientras que el domingo tocará el de Kegums. Rubén Fernández confía seguir codeándose con los mejores.
