Cirujanos plásticos, reconstructores, traumatólogos y anestesistas de Povisa reimplantaron con éxito un brazo a un trabajador que tuvo un grave accidente en el puerto de Marín. Víctor Santiago de Rosario manipulaba una carretilla elevadora cuyos ganchos se desprendieron y le seccionaron el brazo por el codo. Los médicos lograron reimplantarle el brazo en una operación de nueve horas y evoluciona bien.
El Hospital Povisa ha reimplantado con éxito el brazo a un trabajador de 32 años que a principios de este mismo mes había sufrido un grave accidente laboral en el puerto de Marín cuando estaba trasladando palés con una carretilla elevadora.
De acuerdo con el centro hospitalario, los hechos ocurrieron el pasado día 6 de julio, cuando el joven, llamado Víctor Santiago, manipulaba una carretilla elevadora. "Por un fallo mecánico", los ganchos de la carretilla se desplomaron sobre su brazo izquierdo y lo seccionaron por debajo del codo, según explicaron .
El operario fue trasladado de urgencia por una ambulancia medicalizada del 061 hasta Povisa, donde fue intervenido por un grupo compuesto por cinco especialistas, entre cirujanos plásticos y reconstructores, traumatólogos y anestesistas.
En el transcurso de las nueve horas qeu duró de operación, se unió el hueso con placas y tornillos, se reconectaron arterias y venas para recuperar la irrigación, y se suturaron nervios, músculos y tendones, indica el centro hospitalario en un comunicado.
Tras esta intervención, permaneció durante 24 horas en la Unidad de Cuidados Intensivos, y posteriormente pasó a la planta de hospitalización.
Representantes del Hospital Povisa han destacado que, después de varios días desde la intervención y pasada ya la primera semana crítica, "el paciente evoluciona favorablemente y será dado de alta en los próximos días, antes de iniciar su periodo de rehabilitación".
Antecedentes
Povisa suma varios reimplantes de éxito
No es la primera vez que el Hospital Povisa realiza una operación de estas características. Hace más de un año se había dado a conocer otro caso espectacular de estas características.En aquel caso había sido el albañil y carpintero lucense Jesús Lago, quien se había seccionado la mano derecha cuando trabajaba con una máquina para cortar puertas. Consiguió llegar al municipio de As Nogais donde se hizo un torniquete para detener la hemorragia y metió en hielo la parte seccionada de la mano. En Povisa el equipo dirigieo por el cirujano Enrique Moledo le reimplantó la mano tras una complicada intervención que había durado siete horas y que fue un éxito. Con anterioridad, en 2016, Povisa también habí atendido a un trabajador de las obras del AVE en Laza (Ourense) que había perdido un brazo cuando trabajaba con una amasadora. El hospital vigués realizaó el reimplante y el trabajador se pudo recuperar.
