Microsoft pretendía adquirir la aplicación china, que asegura que no planea irse "a ninguna parte"
El secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, confirmó que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, está ultimando los preparativos para tomar una decisión sobre la posibilidad de restringir el uso en el país de la aplicación de vídeos TikTok por la sospecha de que estaría enviando información de sus usuarios al Gobierno chino. Pompeo aseguró que las compañías chinas están "suministrando datos directamente al Partido Comunista Chino y a su aparato de seguridad nacional", como patrones de reconocimiento facial, números de teléfono e información.
La empresa TikTok asegura por su parte que no está compartiendo datos con el Gobierno de Pekín a pesar de las quejas del Gobierno norteamericano. También el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, declaró ayer que "no podemos arriesgarnos a que envíe a China información personal de cien millones de americanos".
Ante esta situación, el gigante informático Microsoft, que pretendía adquirir la sección estadounidense de TikTok, paralizó las conversaciones con la compañía Bytedance ante la oposición de Trump.
Y es que el New York Times publicaba la pasada semana que Microsoft negociaba la compra de la aplicación pero no especificaron en qué punto se encontraban las conversaciones, que podrían desembocar con la entrada del gigante Microsoft en el accionariado de la app, valorada en unos 100.000 millones de dólares. Según las fuentes consultadas por el diario, la pausa no significa que se haya puesto un punto final a esas conversaciones.
Tras el anuncio del mandatario estadounidense, TikTok le respondió a Trump a través de su gerente general en EEUU, Vanessa Pappas, quien aseguró el sábado a sus usuarios que no tiene planes de "ir a ningún lado". También agradeció a los millones de estadounidenses que usan esa red diariamente y avisó de que crearían 10.000 empleos en los próximos tres años, que se sumarán a los 1.500 trabajadores con los que ya cuentan en Estados Unidos.
La empresa TikTok asegura por su parte que no está compartiendo datos con el Gobierno de Pekín a pesar de las quejas del Gobierno norteamericano. También el secretario del Tesoro, Steven Mnuchin, declaró ayer que "no podemos arriesgarnos a que envíe a China información personal de cien millones de americanos".
Ante esta situación, el gigante informático Microsoft, que pretendía adquirir la sección estadounidense de TikTok, paralizó las conversaciones con la compañía Bytedance ante la oposición de Trump.
Y es que el New York Times publicaba la pasada semana que Microsoft negociaba la compra de la aplicación pero no especificaron en qué punto se encontraban las conversaciones, que podrían desembocar con la entrada del gigante Microsoft en el accionariado de la app, valorada en unos 100.000 millones de dólares. Según las fuentes consultadas por el diario, la pausa no significa que se haya puesto un punto final a esas conversaciones.
Tras el anuncio del mandatario estadounidense, TikTok le respondió a Trump a través de su gerente general en EEUU, Vanessa Pappas, quien aseguró el sábado a sus usuarios que no tiene planes de "ir a ningún lado". También agradeció a los millones de estadounidenses que usan esa red diariamente y avisó de que crearían 10.000 empleos en los próximos tres años, que se sumarán a los 1.500 trabajadores con los que ya cuentan en Estados Unidos.
