Cartas al director

Mientras sean recordados no morirán

Ante el aniversario de la vil e interesada matanza en Atocha, quiero recordar a los fallecidos y enviar un afectuoso abrazo a sus familiares.

Es una nación con una idílica y loada Constitución y con un Estado de Derecho ejemplar, dicen los felones y traidores vividores de la política y sus corifeos. Tal es así, que sus ciudadanos desconocen, después de años, las mafias ideológicas y materiales de un atentado que causó 300 muertos y cientos de lisiados físicos y psíquicos. Motivo: Porque hay jueces absolutamente incorruptibles; nadie puede inducirles a hacer justicia: B. Brecht.

Tamaña vileza judicial la causó un juez sin vergüenza. Por ello, y gracias a su recto proceder, ignoramos las mafias ordenantes y sus ejecutores. Lo que sabemos es el motivo, evitar que el PP ganase las elecciones convocadas y así, cambiar el régimen. A quienes ésto pretenden, les recuerdo el constitucional Artículo 8.

El fallo sobre el 11-M, al igual que el del juez que sentenció el golpe al Estado del 01 octubre de 1917, debió basarlo en ensoñaciones por no haber pruebas materiales. Pues, ipso facto quemaron las pertenencias de los afectados y desguazaron los vagones. Y, ante la duda sobre el explosivo, no les interesó su investigación. Más tarde les descubrieron un vagón oculto que raudos lo desguazaron. Quién nunca apareció fue el moro que llevaba cuatro capas de calzoncillos, según un abyecto comunicador.

La labor del juez fue tan fructífera y eficaz, para él y otros, que lo condecoraron.

En  aquellos días, la mayoría de medios de comunicación emitieron falsas soflamas para disponer a los votantes contra el Gobierno y a favor a su recompensador PSOE. Eso sí, no pusieron en la picota al CNI para no importunar a la ingente cantidad de funcionarios públicos, que más parecen privados cobrando de nuestros altos impuestos profusamente dilapidados.

Antes de que los progres y sus parásitos sindicatos endurezcan la Ley de Memoria Histórica impidiéndome exponer mis pensamientos, afirmo, los progres alardean de lo que no tienen ni conocen, honradez y ética. Para ellos lo genéticamente honrado  es, afanar el dinero de los parados y de Formación Profesional. Su ética, que sus afirmaciones las contradigan sus hechos. Ejemplo, el 11-M no merecíamos un Gobierno que nos mintiera, según Rubalcaba.

Pero ellos, cada vez que abren la boca, mienten con el aval de secuaces y cosentidores medios.

A quienes se confabularon para hurtarnos el derecho a saber y conocer lo ocurrido en Atocha, les deseo paguen en vida la indignidad de violar su deber, la traición al Estado de Derecho y el desprecio a los finados, lisiados y familiares.

Por lo dicho, este caro Estado de Derecho que nos venden está diseñado para mafias y sus esbirros.