Un mes y una semana después del final de Liga, el Celta todavía no ha podido anunciar un fichaje. Cierto es que el primer refuerzo lo tiene cerrado desde el pasado enero en la persona de Gabriel Fernández, pero la entidad trabaja para que alguno de los seis o siete refuerzos que cuenta con hacer fragüe antes del arranque de la pretemporada, fijado para el próximo 8 de julio.
Con todo, en la sede de Príncipe se circunscribe esta tardanza en un doble marco: el de un mercado que apenas ha registrado movimientos hasta la fecha –más allá de las grandes operaciones de Real Madrid o Atlético– y el de su intención de realizar refuerzos de calado y con experiencia, por lo que apurarán más que en otras ocasiones las apuestas por las primeras opciones de la dirección deportiva. Es decir, que al técnico celeste, Fran Escribá, es posible que le toque esperar más para finalmente alcanzar todo lo que espera tener.
Además de los dos centrales, el club busca un mediapunta –se da por completo el cupo de mediocentros por el momento–, dos o tres jugadores de banda y dos delanteros. Claro que la polivalencia de algunos de los futbolistas por los que se está negociando, principalmente el excéltico y vigués Santi Mina, podría hacer variar este reparto para cuadrar el conjunto entero.
La vía penal del Toro, en curso
Mientras, en Uruguay parece que el caso judicial que afectaba a Gabriel Fernández se va solventando. Ayer mismo, el abogado de la familia de Romina Fernández, la mujer atropellado por el coche del futbolista, reconoció que el acuerdo por vía civil incluye su traslado a la vía penal.n
