Cartas al director

Mamparas de protección para el personal sanitario

Cuando ya ha pasado medio año desde el comienzo de la pandemia, observamos que cualquier comercio o negocio que trate con el público en general dispone de sus propias mamparas de protección.
Sin embargo, en los centros médicos (consultas de ambulatorios, hospitales, controles de enfermería, etc.), donde nunca se sabe si el paciente o los visitantes, o incluso el propio personal sanitario, puede padecer el virus o no, llevan meses esperando a que se tomen las medidas adecuadas, entre ellas la colocación de mamparas de separación entre el personal sanitario y el resto de la población. ¿A qué esperamos? Si queremos que la población esté bien protegida, habrá que empezar por proteger a los que nos van a proteger, que son los sanitarios.
Familiares, amigos y más gente solidaria ha propuesto donar dichas mamparas al personal sanitario, pero desde la administración se dice que ya lo harán ellos mismos y que han de ser todas iguales.
El caso es que va pasando el tiempo y las mamparas no llegan, con el consiguiente riesgo para la salud de los propios sanitarios y, por extensión, del resto de la población.