El murciano cuenta con la baza de no buscar el juego al pie y Escribá lo somete a estudio
De entrada, el Celta no contaba a principios de verano con ninguno de los jugadores que tuvo la pasada temporada cedidos en otros equipos. Es el caso de cuatro futbolistas que, a estas alturas, todavía siguen a las órdenes de Fran Escribá dentro de la pretemporada: Robert Mazan, Claudio Beauvue, Facundo Roncaglia y Juan Hernández. Con los tres primeros, la cuestión sigue estando igual de clara: no entran en la planificación y, con más o menos fortuna, se les busca salida. Pero con el cuarto hay más lugar a la duda.
El murciano Juan Hernández subió el pasado verano a la primera plantilla desde el filial, acompañando en el camino a Kevin Vázquez. Sin sitio para Antonio Mohamed, se le buscó un equipo en Segunda para seguir creciendo, pero una grave lesión de rodilla prácticamente le impidió jugar en toda la campaña. Ahora, ya recuperado, sigue siendo un desconocido para la mayoría de la afición celeste pero cuenta con un factor a favor: se define más por atacar el espacio que por recibir al pie y crear. Una característica que no tenía ningún compañero más hasta la consecución del último fichaje, Santi Mina.
El propio Escribá reconoció en su única rueda de prensa del verano que el pasado ejercicio se había topado con ese problema: todos sus jugadores ofensivos, sin negar su calidad, tenían querencia por recibir al pie. El valenciano apuntó que ahora quería contar con más variedad. La que le otorga Mina –"nos da muchas variantes", apuntaba Felipe Miñambres, director deportivo, en la presentación del vigués el pasado viernes– y la que le puede dar también Juan Hernández. De ahí que la salida del murciano se aplazase, porque el entrenador valenciano quería observarlo de cerca.
De la conclusión de ese análisis de Escribá están pendientes el club, el propio jugador y varios equipos que lo pretenden. Entre ellos, el rival de ayer en Portonovo, el Lugo. Que no lo pudo seguir en directo porque, como le sucedió a Hugo Mallo, no pudo jugar al sufrir una sobrecarga leve.
Los próximos días dirán. Porque, entre otras cosas, el Celta sigue pendiente del mercado. Está claro que Manuel Agudo 'Nolito' no responde a ese perfil de jugador que busque el espacio. Pero siempre se ha barajado una incorporación más que sí podría cerrar la puerta a Juan Hernández.n
El murciano Juan Hernández subió el pasado verano a la primera plantilla desde el filial, acompañando en el camino a Kevin Vázquez. Sin sitio para Antonio Mohamed, se le buscó un equipo en Segunda para seguir creciendo, pero una grave lesión de rodilla prácticamente le impidió jugar en toda la campaña. Ahora, ya recuperado, sigue siendo un desconocido para la mayoría de la afición celeste pero cuenta con un factor a favor: se define más por atacar el espacio que por recibir al pie y crear. Una característica que no tenía ningún compañero más hasta la consecución del último fichaje, Santi Mina.
El propio Escribá reconoció en su única rueda de prensa del verano que el pasado ejercicio se había topado con ese problema: todos sus jugadores ofensivos, sin negar su calidad, tenían querencia por recibir al pie. El valenciano apuntó que ahora quería contar con más variedad. La que le otorga Mina –"nos da muchas variantes", apuntaba Felipe Miñambres, director deportivo, en la presentación del vigués el pasado viernes– y la que le puede dar también Juan Hernández. De ahí que la salida del murciano se aplazase, porque el entrenador valenciano quería observarlo de cerca.
De la conclusión de ese análisis de Escribá están pendientes el club, el propio jugador y varios equipos que lo pretenden. Entre ellos, el rival de ayer en Portonovo, el Lugo. Que no lo pudo seguir en directo porque, como le sucedió a Hugo Mallo, no pudo jugar al sufrir una sobrecarga leve.
Los próximos días dirán. Porque, entre otras cosas, el Celta sigue pendiente del mercado. Está claro que Manuel Agudo 'Nolito' no responde a ese perfil de jugador que busque el espacio. Pero siempre se ha barajado una incorporación más que sí podría cerrar la puerta a Juan Hernández.n
