Cartas al director

Las izquierdas y sus chiringuitos afines…, ¿quieren romper España?

No tienen desperdicio alguno y terminarán desquiciando y humillando a nuestra propia sociedad. Quien esto afirma hoy, fue testigo de excepción del concubinato obsceno en la Venezuela Bolivariana, lo que Hugo Chaves, al llegar, legalizó, financió e utilizó inmediatamente. Así, a su sombra, se cometieron todo tipo de tropelías y la corrupción cambió de bando, con sus múltiples arbitrariedades y expropiaciones aberrantes, que acabarían con la tranquilidad y riqueza de aquel país. Ello marcaría , el principio de la tragedia miserable, que hoy él vive y padece. Todo aquel (festín de Baltasar y sus bandas), lo disfrazaron sus centros mediáticos, corrompidos y cómplices, como “Misiones Sociales para la Gente…”.
Entre toda esta maraña de despropósitos alucinantes, debemos mencionar lo que está sucediendo hoy en España, cuya similitud es evidente, y protagonizada por los mismos. Así se multiplica hoy la invasión violenta y desproporcionada de indocumentados, protegidos por mafias y sus ONG de tapadillo, que a la vez, están financiadas y protegidas por este Gobierno Frankenstein y Comunista. Es una copia al carbón de lo sucedido en Venezuela. Sus fines ocultos y destructores son idénticos y ya no sorprenden a nadie y los veremos votando, lo que acabará desquiciando a nuestra pacífica y tolerante ciudadanía. Al utilizar su solidaridad natural y ancestral como arma arrojadiza para su camuflaje y perversos fines ideológicos que están jugando irresponsablemente con la integridad y convivencia de todos los españoles.
Lo que está sucediendo en Canarias, ya merece hoy la atención urgente por sus desesperante SOS. Temen sus habitantes que los conviertan, estos irresponsables, en una nueva Lampedusa y sean desplazados muy pronto por estos aventureros invasores e indocumentados. En comunicación telefónica con un pariente que allí vive, me narró el desamparo y desesperación total que hoy viven. Ante la invasión descarada de los últimos días, que los están alojando en hoteles destinados al turismo y les dan una paga efectiva de ochocientos euros. ¿Cómo no van a venir, con este afecto llamada, tan generoso y cómplice de este Gobierno? Acabarán con su turismo, que es la fuente de vida de sus islas. Mientras tanto, los casi diez mil emigrantes españoles retornados obligatoriamente de Venezuela, y miles son canarios jubilados del IVSS, y van a cumplir cinco años que Maduro no les paga sus pensión, y este Gobierno los está dejando solos y que se mueran de hambre, para ellos no hay ayudas… Mientras tanto, siguen haciendo negocios clandestinos con sus verdugos de Venezuela. Que los arruinaron, expropiaron y muchos allí perdieron su vida por defender sus propiedades, ganadas con sangre, sudor y lágrimas. Y tienen que soportar a Zapatero, Sánchez, Iglesias y sus bandas, como defensores de sus verdugos.
Este camuflaje de conveniencia desgraciada para disfrazarlos en emigrantes, tendrá  un efecto devastador y dañino para la convivencia ciudadana, incluyendo a la sana y legal emigración, que hoy reside entre nosotros ya integrada. El irresponsable calificativo solo causará resentimiento, desconfianza y xenofobia hacia todos los emigrantes y sin distinción alguna. Su afán está claro, como también las consecuencias que todo este disparate causará. Quienes por desgracia ya las vivimos, alertamos sobre las mismas. No tardarán mucho en proliferar aquí los delitos más aberrantes, prostíbulos clandestinos, apuestas ilegales de todo tipo, con una proliferación del top-manta y la venta callejera de drogas de todo tipo, colores y sabores, que harán de este país una pequeña Sinaloa. De nada servirá la eficiencia y celo de nuestros Cuerpos y Fuerzas de Seguridad. Los desmoralizarán sistemáticamente y los corromperán, así lo hicieron en Venezuela…
Aquí cabe una pregunta que sorprenderá a muchos… ¿Qué hacen nuestras FF.AA. protegiendo fronteras ajenas a un coste y sacrificios millonarios mientras las nuestras son violadas con el consentimiento y complicidad del Gobierno actual? Y no pasa absolutamente nada… Y tú, sigue ciego tu camino, con permisos de mi apreciado: Arcadi Espada.