De Oseira al Empire State

Una de las salas del museo del Empire State ideada por Jorge Martínez, arquitecto con raíces ourensanas, dedicada al personaje de King Kong.
photo_camera Una de las salas del museo del Empire State ideada por Jorge Martínez, arquitecto con raíces ourensanas, dedicada al personaje de King Kong.
El nuevo museo del icónico rascacielos de Nueva York es obra de Jorge Martínez, un arquitecto con raíces en Ourense y que descubrió el amor a la profesión en los veranos que pasó en el monasterio de la Ribeira Sacra.

Lo que tenía antes el Empire State eran las vistas y la cola, hemos convertido esa espera en una experiencia". Habla Jorge Martínez, el diseñador encargado del nuevo museo de este emblemático rascacielos de Nueva York por el que pasan todas las culturas del mundo. Este hijo de emigrantes ourensanos lidera el proyecto de 165 millones de dólares que acerca a visitantes de todo el mundo a la historia de un edificio singular, construido en 13 meses hace casi un siglo. Otra cultura, la gallega, le inspira en cada uno de sus trabajos. La plaza mayor de Celanova le dio a Martínez la idea para otro proyecto museístico: el memorial del 11-S.
"Cuando nos llegó la oferta, pensé que simplemente querían hacer la renovación del observatorio del Empire State. Pero esto era más grande, era hacer la experiencia de nuevo, desde la calle hasta la cima. La entrada es la primera que se hace nueva desde que abrió en 1931", cuenta el arquitecto. Esta semana se abrieron unas galerías con salas interactivas donde se puede ver a King Kong o a los obreros que construyeron el rascacielos. "Se crean memorias. La gente hace selfies, ve la historia del edificio...", explica Martínez. El culmen del proyecto llega en septiembre: la cúpula de la antena. El cielo del Empire State, ideado por el hijo de emigrantes ourensanos que se crió, con su hermano Avelino, pasando los veranos en el monasterio de Oseira. "Aquello me marcó para siempre, me dejó huella", recuerda el arquitecto. Su tío abuelo, Juan María, era monje. "Ahí pasamos nuestra juventud. Nuestro tío lideró todas las renovaciones del monasterio. Vimos lo que era la arquitectura, los materiales, los claustros, la luz...Eso para mi fue muy impactante. Es un espacio que te mueve. Y eso lo veo por toda Galicia y no lo veo en otras partes del mundo", anota.

a La luz del monasterio
"Nací en la comunidad gallega de Nueva York. Me ayuda ser de aquí, entiendo lo que es criarse a la sombre del Empire State, símbolo e icono de Nueva York. Pero también ayuda tener otra parte de mi vida en Galicia. El Empire State tiene un eje común, pasan tantas culturas por aquí. La inspiración gallega está siempre en mis obras. El problema de arquitectos muy grandes es el ego. Hacen su historia. Lo que me hace la persona que soy es la cultura gallega, la empatía de escuchar y tener en cuenta las sensibilidades de otras personas. El Empire State es una historia mundial, está en nueve idiomas y acoge a todas las culturas. No puedes hacer tu molde".
La misma historia universal utilizó para el memorial del 11-S. "El 11-S es una historia muy fuerte, mundial, no se puede poner una estampa propia". Pensó en la plaza mayor de Celanova, donde dice que está su corazón, para crear un espacio de conversación e íntimo a la vez en la sala en la que está la viga conservada de las Torres Gemelas. n

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