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Cornada para el Atlético

Jan Oblak luce cariacontecido tras encajar uno de los dos goles que el Leipzig le metió ayer en el estadio José Alvalade de la capital portuguesa.
photo_camera Jan Oblak luce cariacontecido tras encajar uno de los dos goles que el Leipzig le metió ayer en el estadio José Alvalade de la capital portuguesa.
El Leipzig apea de Europa al equipo de Simeone con un gol en los últimos compases

El Leipzig nació en el año 2009 y bajo el amparo de la firma Red Bull protagonizó un ascenso meteórico desde las últimas categorías del fútbol alemán hasta lograr ayer meterse entre los cuatro mejores equipos de Europa. Lo hizo a costa del Atlético de Madrid, que se quedará un año más sin levantar la Liga de Campeones. El equipo alemán superó al rojiblanco en el José Alvalade de Lisboa tal y como dice el lema publicitario: con alas. Así jugaron los pupilos de Julian Nagelsmann, que, como los toros que lucen en su escudo, cornearon sin miramientos a un conjunto madrileño inferior.
Un gol del español Dani Olmo a la vuelta del descanso y otro de Savic en propia puerta tras un disparo del norteamericano Adams rubricaron la eliminación de un conjunto rojiblanco que mejoró con la entrada de Joao Félix. El portugués compareció sobre el césped cuando su equipo estaba en inferioridad en el marcador y protagonizó varias buenas acciones. Una de ellas acabó en penalti, que él mismo transformó, para dar esperanzas a los colchoneros.
Pero el empuje no pasó de ahí. El equipo de joven técnico alemán -Nagelsmann tiene solo 33 años- retomó el dominio. Un tiro desde fuera de Adams, un rebote en Savic que descolocó a Jan Oblak y un gol que agranda la frustración del equipo rojiblanco en la Liga de Campeones. Al Leipzig le espera el París Saint Germain en las semifinales; al Atlético, la decepción.
Porque este cuadro rojiblanco tiene límites esta temporada. Por mucho que Jan Oblak le haya dirigido mucho más lejos de lo que mereció en Anfield, por mucho que haya crecido de forma indudable tras el parón del Covid-19 o por mucho que la increíble irrupción de Marcos Llorente le haya aportado unas posibilidades ofensivas que le han hecho más incisivo. 
Finalmente y pese a la vitola de favorito que se le dio para esta final a ocho en la capital lusa, el Atlético cayó. Y lo hizo con justicia. Porque el Leipzig, con el gallego Angeliño en sus filas, fue mejor ayer.

Leipzig: 
Gulácsi; Klostermann, Upamecano, Halstenberg, Angeliño; Laimer (Adams, m. 72), Kampl; Sabitzer, Dani Olmo (Schick, m. 82), Nkunku (Haidara, m. 82); Poulsen. 
Atlético de Madrid: 
Oblak; Trippier, Savic, Giménez, Lodi; Koke (Felipe, m. 91+), Herrera (Joao Félix, m. 58), Saúl, Carrasco; Llorente, Diego Costa (Morata, m. 72). 
Goles: 
1-0, m. 50: Dani Olmo. 1-1, m. 70: Joao Félix, de penalti. 2-1, m. 87: Savic, en propia puerta. 
Árbitro: 
Szymon Marciniak (Polonia). Amonestó a Lodi (m. 62), por el Atlético de Madrid, y a Klosterman (m. 70), Kampl (m. 81) y Haidara (m. 86), por el Leipzig. 
Incidencias: 
Partido disputado en el estadio José Alvalade de Lisboa sin público

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