Miguel Fidalgo, el vocal relevado en el Consorcio critica la "poca vergüenza" del alcalde
El alcalde de Vigo, Abel Caballero, considera que la delegada del Estado en el Consorcio de la Zona Franca, Teresa Pedrosa, actuó de forma "totalitaria" y "absolutamente intolerable" al pedir el cese del presidente del grupo Rodman, Manuel Rodríguez, como vocal del organismo, y tildó esta decisión de "purga".
El regidor ve "intolerable" que Pedrosa haya pedido el cese del que definió como un "gran empresario", y mantuvo que "el Gobierno de España no lo puede tolerar". "La ciudad está escandalizada", apostilló.
Pese a los motivos esgrimidos por la delegada, que adujo que se sintió traicionada tras votar Rodríguez con el alcalde, lo que le permitió retirar los presupuestos, Caballero sostuvo que "aplicó su criterio, porque votó lo que creía que era bueno para la ciudad". "¿Pero esta señora que se cree que es la democracia? La democracia es cuando el que se nombra usa su criterio", sostuvo, criticando que lo que quería la delegada es que operase "a sus órdenes".
"Cesa a un gran empresario porque su criterio era que las inversiones de Zona Franca tienen que ser para Vigo y no para la Xunta, algo que avala toda la ciudad, y porque defendió que hay que acelerar las inversiones en el polígono de Citroën", añadió.
Mientras, por otro lado el concejal del PP Miguel Fidalgo, relevado como vocal de Zona Franca para ser sustituido por la socialista María José Caride, criticó la "poca vergüenza" del alcalde y presidente del pleno del ente por acusar a la delegada de purga.
Fidalgo subrayó que Caballero es quien se "cargó a alguien" en el Consorcio de Zona Franca, "saltándose incluso el reglamento municipal", para perpetrar un "golpe de estado".
Cree Fidalgo que Caballero "se descalifica a sí mismo" con estas declaraciones y demuestra estar "nervioso" porque es consciente de que "su golpe de estado va a fracasar".
Es más, califica a Caballero como "el alcalde más antidemocrático de España".