Las corrientes que integran el Consello del BNG debatirán este sábado la propuesta de la Executiva para suspender el proceso de la 13 Asamblea Nacional y que ésta se celebre el fin del semana del 28 y 29 de enero.
El Encontro Irmandiño, que lidera Xosé Manuel Beiras, presentó una enmienda con el objetivo de retrasar el cónclave hasta el 24 y el 25 de marzo. La dirección nacionalista apuesta por enero para celebrar el cónclave, aunque esta propuesta no es unánime, ya que +Galiza (que forma parte de ese órgano pero en minoría) defenderá la pertinencia de adelantar el cónclave para antes de las elecciones.
Por su parte, la UPG está a favor de retrasar la asamblea, pero, a priori, apoya la propuesta de la Executiva, en la que conforma mayoría con el único miembro de Movemento Galego ao Socialismo que está integrado en la dirección nacionalista.
Con todo, el Encontro Irmandiño presentó una enmienda en la que, 'reiterando el compromiso con el consenso de suspensión' del cónclave, pide más tiempo para 'poder llevar tranquilamente los arreglos internos sin interferencias de los procesos políticos externos u otras agendas sociales'.
Movidos también por el objetivo de 'preservar el proceso de reactivación y reafiliación' y el fin de 'abrir al máximo la participación efectiva en las fases previa y en la propia sesión plenaria' de la asamblea, los 'irmandiños' presentaron una enmienda, en la que se recoge un nuevo calendario para el proceso interno del partido.
La parte resolutiva de esta alegación señala que, a través de su aprobación, el Consello Nacional 'acuerda dejar en suspenso el acuerdo de convocatoria de la Asamblea Nacional hecho por el Consello el 2 de julio de este año' y convoca una nueva reunión del máximo órgano de decisión entre asambleas para el 17 de diciembre, en el que se convocaría la nueva fecha, el 24 y 25 de marzo.
Así las cosas, con toda probabilidad la propuesta de aplazamiento saldrá adelante, aunque la fecha estará a expensas de un acuerdo entre los miembros del Consello Nacional que, salvo sorpresa de última hora, se da por seguro.
Por su parte, la UPG está a favor de retrasar la asamblea, pero, a priori, apoya la propuesta de la Executiva, en la que conforma mayoría con el único miembro de Movemento Galego ao Socialismo que está integrado en la dirección nacionalista.
Con todo, el Encontro Irmandiño presentó una enmienda en la que, 'reiterando el compromiso con el consenso de suspensión' del cónclave, pide más tiempo para 'poder llevar tranquilamente los arreglos internos sin interferencias de los procesos políticos externos u otras agendas sociales'.
Movidos también por el objetivo de 'preservar el proceso de reactivación y reafiliación' y el fin de 'abrir al máximo la participación efectiva en las fases previa y en la propia sesión plenaria' de la asamblea, los 'irmandiños' presentaron una enmienda, en la que se recoge un nuevo calendario para el proceso interno del partido.
La parte resolutiva de esta alegación señala que, a través de su aprobación, el Consello Nacional 'acuerda dejar en suspenso el acuerdo de convocatoria de la Asamblea Nacional hecho por el Consello el 2 de julio de este año' y convoca una nueva reunión del máximo órgano de decisión entre asambleas para el 17 de diciembre, en el que se convocaría la nueva fecha, el 24 y 25 de marzo.
Así las cosas, con toda probabilidad la propuesta de aplazamiento saldrá adelante, aunque la fecha estará a expensas de un acuerdo entre los miembros del Consello Nacional que, salvo sorpresa de última hora, se da por seguro.
