“Belorizonte’ fue un disco hecho de la casualidad y de la curiosidad”

Anunció que este es un disco muy especial.
Lo es. Durante tres años estuve viajando por Latinoamérica y grabando canciones entre 2016 y 2017. Luego vino el proceso de mezcla y cierre de los temas. Es un disco que se hizo de forma itinerante, que surgió entre Uruguay y Argentina. Me movía con un ordenador y un tarjeta de sonido, mientras entraba en contacto con músico de allí.
¿Su paso por estudio en qué modificó el repertorio?
La parte del discurso no varió, lo llevaba bastante planteado. Lo que cambió fue el vestuario. El germen es a través de la voz o la guitarra y lo vestimos de distintas maneras. Fui introduciendo instrumentos folklóricos, música electrónica y vivencias del viaje.
Tiene un importante eco latinoamericano. ¿Ha sido buscado de forma intencionada?
Llevo muchos años escuchando esta música, en la que hay muchas escenas, aunque el folk y la música popular conviven de forma más natural. Cuando empecé el disco fue una decisión tomada en una tarde, no fui a hacerlo. Tenía un encuentro con músicos y la idea era regresar a Madrid a grabar el disco. Fascinado por lo que vi, me quedé. Siempre digo que fue un disco hecho de la casualidad y de lacuriosidad.
¿Quedarse fue un arrebato?
Fue a lo loco, a la ventura y a la inconsciencia. Iba con dinero para dos meses que se convirtió en dinero para seis. Tuve la suerte de conocer a gente increíble que me invitaron a quedarme en su casa. Fue un cúmulo de circunstancias  porque yo iba con la mirada muy abierta y atenta. Fue un viaje introspectivo pero también cara al exterior para captar cosas que me sacase de la rutina de Galicia y Madrid que no me permitía hacer nada nuevo.
¿Existe entonces una deuda con Latinoamérica?
Estoy muy en deuda. Viajo allí siempre que puedo, normalmente cada tres años. Seguro que estaré esta Navidad en Uruguay.
La mejor presentación del disco han sido los dos vídeoclips de los primeros singles, “Cuerpos” y “La Noche”. ¿Es una apuesta decidida por el audiovisual?
El primero es un collage digital de una artista mexicana, Yazmín Huerta, que conocí en la red social de creación Behance, donde los artistas cuelgan sus obras. Estudié comunicación audiovisual y estoy muy pendiente de los últimos diseños para vestir mis canciones. La segunda tiene una estética cinematográfica. La música es una cumbia con punk, basada en un trabajo de los años 40 de Lucho Fernández. Aparecen Toni Lomba y Eladio Santos.
Los dos tienen imágenes de Vigo, ¿es una seña de identidad?
No tiene mayor trascendencia. Tenemos un paraíso y podemos darlo a conocer.