El parón completo debido al confinamiento y el miedo a los brotes ha puesto entre la espada y la pared a estos negocios, que dan el año por perdido y se centran ya en la siguiente temporada turística con cierto optimismo
Algunas han cerrado, otras muchas todavía continúan con más de la mitad de la plantilla en ERTE y las que funcionan con cierta normalidad reciben una cuarta parte de los clientes que despachaban habitualmente. Las agencias de viajes son uno de los negocios más duramente afectados por la crisis del coronavirus, pues con la pandemia creciendo a diferentes ritmos a lo largo del mundo y las constantes limitaciones de viaje imposibilitan que el sector turístico pueda funcionar a pleno rendimiento.
El trabajo de todos los meses previos en las agencias de viajes se fue al traste con el decreto del estado de alarma y consecuente confinamiento a mediados de marzo. Cancelaciones, reembolsos y meses de facturación cero hicieron mella en las arcas de las agencias viguesas, que únicamente han podido abrir en el último mes gracias a la apertura de las fronteras del espacio Schengen y el fin de la desescalada en el territorio nacional.
Durante julio, y con la llegada del verano y las vacaciones, el goteo de clientes empezó a ser algo más frecuente, pero todavía muy lejos de las cifras que se manejan en una temporada estival habitual. Algunas de las agencias estiman su facturación en, aproximadamente, un 20% de un mes de julio normal y corriente. Pero la llegada de los brotes a ciertos puntos de la península, de acuerdo con gran parte de las agencias consultadas, ha frenado la tendencia positiva de las últimas semanas. El miedo a quedarse "atrapado" en su destino vacacional debido a un nuevo confinamiento todavía se deja ver.
Sin embargo y pese a todo, todavía queda gente dispuesta a viajar en medio de esta situación, y el destino más popular sigue siendo el mismo de todos los veranos: las islas Canarias. Aunque, debido a las circunstancias actuales, el turismo interior –en especial dentro de la propia autonomía– ha sufrido un importante crecimiento y es una de las mayores demandas de los viajeros vigueses. Un dato curioso que muchas de las agencias notan es que se trata de "huir" de las playas hacia zonas del interior, donde es más fácil mantener las distancias de seguridad.
Ahora mismo la incertidumbre reina en las agencias de viajes, pero en estas ya miran hacia el 2021 con optimismo y ansias de recuperarse de este bache.
El trabajo de todos los meses previos en las agencias de viajes se fue al traste con el decreto del estado de alarma y consecuente confinamiento a mediados de marzo. Cancelaciones, reembolsos y meses de facturación cero hicieron mella en las arcas de las agencias viguesas, que únicamente han podido abrir en el último mes gracias a la apertura de las fronteras del espacio Schengen y el fin de la desescalada en el territorio nacional.
Durante julio, y con la llegada del verano y las vacaciones, el goteo de clientes empezó a ser algo más frecuente, pero todavía muy lejos de las cifras que se manejan en una temporada estival habitual. Algunas de las agencias estiman su facturación en, aproximadamente, un 20% de un mes de julio normal y corriente. Pero la llegada de los brotes a ciertos puntos de la península, de acuerdo con gran parte de las agencias consultadas, ha frenado la tendencia positiva de las últimas semanas. El miedo a quedarse "atrapado" en su destino vacacional debido a un nuevo confinamiento todavía se deja ver.
Sin embargo y pese a todo, todavía queda gente dispuesta a viajar en medio de esta situación, y el destino más popular sigue siendo el mismo de todos los veranos: las islas Canarias. Aunque, debido a las circunstancias actuales, el turismo interior –en especial dentro de la propia autonomía– ha sufrido un importante crecimiento y es una de las mayores demandas de los viajeros vigueses. Un dato curioso que muchas de las agencias notan es que se trata de "huir" de las playas hacia zonas del interior, donde es más fácil mantener las distancias de seguridad.
Ahora mismo la incertidumbre reina en las agencias de viajes, pero en estas ya miran hacia el 2021 con optimismo y ansias de recuperarse de este bache.
