Cartas al director

Puntualizaciones sobre la polémica del colegio Canicouva

 En la última noticia publicada en su periódico sobre el colegio Canicouva hay varios errores que me gustaría puntualizar.
1. Nadie está en contra de que se salvaguarde la seguridad de los alumnos (entre ellos mi hija, que comenzó este curso el colegio).
2. Bajo el edificio, anexo al colegio, que tan en ruinas está, se aparcan los coches de los profesores.
3. Respecto a ese mismo edificio anexo y a esa aseveración que reza "no dejamos que los niños se acerquen a ese edificio, no parece del todo verdad. El colegio tiene un huerto que los alumnos visitan en distintos grupos cada semana y el sendero que da al huerto está entre el colegio y el susodicho edificio "en ruinas".
4. Las aceras de las que se habla están en Clara Campoamor, no en la salida/entrada del colegio.
5. La salida/entrada del colegio no es para nada segura. No sólo da a una calle cuyo tráfico escaso se intensifica notablemente en las horas puntas, coincidiendo con las horas de entrada y salida de los niños; además de eso, el muro del colegio hace un recodo que impide la visibilidad tanto para el peatón como para el coche. Aunque en la misma salida del colegio no hay paso de peatones para cruzar la calle, eso no hace menos peligrosa la salida.
6. Resulta tremendamente desconcertante la gran diferencia entre las fotos de la noticia que habla sobre el descontento de los padres, véase la foto con grupos de padres, y la foto en la que se dice que no todas las familias están en contra, véase el colegio vacío en sus alrededores con excepción del director del centro apoyado en ese peligroso recodo que anula la visibilidad de la salida y la vecina de la zona paseando al perro.
Me gustaría señalar por último, pero no menos importante, que la decisión de mover la valla se tomó de forma unilateral por parte de la dirección del centro y que dio aviso a las familias de su decisión de mover la valla el jueves 16 de mayo, siendo el viernes 17 de mayo festivo y el lunes 20 de mayo ya estaba la valla colocada. En ningún momento hubo diálogo para buscar soluciones o ubicaciones alternativas de la valla con las familias, teniendo en cuenta como se jacta el director de la comunicación con las familias.
Respeto que haya quien esté de acuerdo con esta decisión, cada uno es libre de opinar lo que quiera pero yo me siento muy preocupada por mi hija, que se cree muy mayor con 4 años pero no lo es.
Cada vez que tengo que verla desde el otro lado de la verja del colegio buscándome, ella que sabe que siempre espero a que entren para marcharme, se me parte el alma. Y ver que nadie del centro se preocupa de velar porque la puerta y los portales del centro queden cerrados una vez que han entrado los niños me produce una gran inseguridad.
Espero que puedan llegar a entender una pequeña parte de la inquietud y el malestar que algunas familias del centro sentimos.